Gabinete maquillado
La “encuestitis aguda”, que sufre el Presidente Alejandro Toledo, lo está llevando a tomar medidas desesperadas para subir su pobrísimo nivel de aprobación. Pero no solo apunta a mejorar sus bonos personales, sino que parece que quiere empezar a curarse en salud, pues sabe que cuando culmine su mandato (si es que lo lograr), las cosas se le pondrán color de hormiga, y tendrá muchas cosas que responder a la justicia.
No hace falta ser muy agudo para darse cuenta que el anuncio de entregar 30 dólares mensuales a los pobres, denominado programa Pro Perú (más parece Perú Posible), apunta a manipular a la población de escasos recursos para arrancarle algunos votos en las elecciones del 2006. Toledo sabe que su partido (por llamarlo de alguna manera) corre el riesgo de desaparecer del mapa político después del 2006. Por ello, quiere asegurar por lo menos algunos parlamentarios que se sirvan de escuderos en un próximo gobierno, cuando empiece a rendir cuentas de las innumerables denuncias que afronta.
Pero no basta con el programa de entrega de dinero. Se requiere también de un gabinete proclive a los planes de Perú Posible y del mismo Toledo. Por lo tanto, había que remover algunos ministros independientes para que esas carteras pasen a manos de militantes de la chakana. Ellos no solamente garantizan que el programa Pro Perú se maneje con criterios de clientelismo político, sino que de paso esos ministerios se conviertan en nuevas agencias de empleos para la militancia toledista.
Las críticas a los cambios ministeriales han llovido desde distintas direcciones. Y no es porque los ministros salientes hayan tenido una gran gestión, sino básicamente por ser independientes. La presencia de los militantes de Perú Posible como Juan Sheput, en el ministerio de Trabajo; Eduardo Salhuana, en el portafolio de Justicia; y Manuel Manrique Ugarte, en el ministerio de Agricultura, no solo satisfacen las exigencias del partido de gobierno sino que garantizan las condiciones para el clientelismo político preelectoral. Hay que recordar que de los cuatro nuevos ministros, solo el de la producción David Lemor, es independiente.