Al cierre de nuestra edición, se confirmaban dos noticias, una buena y otra pésima, para los pueblos de América Latina que lucha porque otro mundo es posible. La buena: en Uruguay, por primera en su historia, las fuerzas de izquierda y progresistas, agrupadas en el Frente Amplio, han llegado al gobierno y tienen mayoría absoluta en el legislativo. El médico socialista, Tabaré Vásquez, se proclamó presidente de Uruguay, luego de derrotar en primera vuelta por más del 50 por ciento a los tradicionales partidos blanco y colorado.

Vásquez, quien fue alcalde de Montevideo, la capital uruguaya, estuvo a punto de llegar al gobierno en las elecciones pasadas, en que las fuerzas de derecha tuvieron que unirse para derrotarlo en segunda vuelta.

Ahora, la pésima noticia: el guerrerista, fundamentalista religioso y político; ex alcohólico y considerado uno de los peores presidente de EEUU, George W. Bush, fue reelegido para un nuevo mandato de 4 años, tras derrotar ajustadamente a su oponente demócrata John kerry. Con esta victoria, Bush, tiene ahora las manos libres para seguir desarrollando sus guerras de invasión, como en Irak; y seguramente ahora las ampliará a Irán, Corea del Norte y Cuba; poniendo cada vez más en riego al mundo entero. Cuesta creer que los ciudadanos de la primea potencia mundial puedan haber reelegido a un presidente tan mediocre, por decir lo menos.