La Consulta Vecinal de los pueblos de Ayabaca y Huancabamba constituye un ejemplo y un referente que repercutirá en las luchas que libran otros pueblos de América Latina en la defensa de sus recursos naturales, afirmó Natalia Landívar, representante ecuatoriana de la Red FIAN, una de las seis observadoras extranjeras, quien estuvo presente en la jornada democrática que se cumplió el pasado 16 de setiembre en el distrito de Pacaipampa, provincia de Ayabaca.

Remarcó que esta consulta se ha dado en el marco del proceso de integración que viven los pueblos latinoamericanos, y la calificó como una experiencia inédita para su país, Ecuador, en donde tampoco las empresas mineras o petroleras respetan el liderazgo de las organizaciones y la voluntad de las poblaciones afectadas por estas actividades extractivas.

“En Ecuador muchas veces las poblaciones se ven obligadas a tolerar estos proyectos que afectan sus intereses. Por eso creo que esta experiencia de consulta y participación popular tendrá repercusiones en mi país, pues tenemos que empezar a aprender de lo que hacen nuestros hermanos peruanos”, agregó la observadora internacional.

Natalia Landívar señaló que quedó muy impresionada de constatar la responsabilidad de la población que con mucho entusiasmo arribó desde los lugares más lejanos del distrito; de igual manera, por la labor de las rondas campesinas en brindar seguridad a los integrantes del comité electoral que dirigió la consulta. “En todo momento pude ver el entusiasmo de la población para emitir tu opinión sobre un proyecto minero que no recoge los intereses ni la participación de los verdaderos afectados”, agregó.

De otro lado, la representante ecuatoriana agregó que la actitud del gobierno peruano de desconocer el derecho de los pobladores a opinar si están o no de acuerdo con la minería, no ha sido la más adecuada. Agregó que “El gobierno no debería tener miedo a consultar a la población. Ello solo puede explicarse porque tal vez lo que representan son los intereses de la empresa minera Majaz, lo que constituye una actitud autoritaria y represiva. La población de Pacaipampa ha dado muestras de que tienen muy claros sus proyectos de desarrollo rural que son totalmente diferentes a la actividad minera”.

Natalia Landívar, también participó en el Consejo Nacional de la CCP, en representación de la red FIAN, para explicar los alcances de su trabajo que busca que los pueblos ejerzan su derecho a la alimentación y a la soberanía alimentaria. Este es un derecho que no solo le asiste a los campesinos, pues ya forma parte de las reivindicaciones de las luchas populares y sociales, y por lo tanto, los gobiernos deberían considerarlas como políticas públicas, sostuvo la representante ecuatoriana.