La Confederación Campesina del Perú (CCP), no sólo es la organización campesina más antigua del Perú, sino también la más añeja de América Latina. Esta agremiación rural, nació en la costa peruana; por lo que sus primeros asentamientos recorrió con fuerza por allí, aunque también, se extendió a los andes del Perú.

Los méritos de la CCP, es la democratización de la sociedad rural peruana, en términos de la tenencia de la tierra y del ejercicio político en gran medida corresponde a ella, porque esta es la organización que desplegó la reforma agraria a través de la vía campesina con las tomas de tierra, lo que contribuyó a la ruptura del espinazo de los terratenientes y gamonales; y al mismo tiempo, la democratización política, económica y social de nuestra patria corresponde a las luchas de la CCP.

En los años de 1969, cuando se plasma la reforma agraria del general Juan Velasco Alvarado, la CCP fue la que con énfasis combatió el carácter reformista burgués de aquella reforma; sin embargo, como los ejecutores de dicha reforma entraron con todo el aparato político y ideológico, las fuerzas independientes, democráticas y revolucionarias de la CCP sufrieron algunos golpes políticos. No se entendió que sus bases integraban el proletariado agrícola de los latifundios costeños y que estos a través de la reforma agraria vía la cooperativización agraria se convirtieron en socios y en campesinos productores agrarios. Esta falencia, fue uno de los factores a que la CCP fuera desplazada de la costa, ahí entonces toma fuerza de su presencia en la sierra peruana y más adelante su presencia recorre la amazonía del Perú.

El gobierno militar de Velasco, en la sierra implementó las cooperativas agrarias de producción (CAPs), sociedades agrícolas de interés social (SAIS) y empresas rurales de propiedad social (ERPS), y algunas comunidades campesinas fueron incorporadas como asociadas de las SAIS. El referido gobierno, para las comunidades campesinas presentó como alternativa las cooperativas comunales, por que uno de los objetivos de la reforma agraria era eliminar el minifundio. Y ahí, otra vez, la gloriosa CCP adoleció de una alternativa frente al intento de cooperativización de las comunidades.

Ya por los años de 1980, la CCP recogió las opciones de empresas comunales de las comunidades campesinas de la Región Puno a través de la FDCP; las tomas de tierra de 1979 de la zona sur de Puno terminaron en parcelación, por lo que la Federación Agraria Departamental “Rumi Maki”, emplazó a la FDCP, diciendo, ¿después de las tomas de tierra que?. La respuesta fue la empresa comunal, que se asume con fuerza desde 1980 en la lucha por la reestructuración de las empresas asociativas.

Es necesario que la CCP, como parte de sus labores, siembre flores por sus mártires que perdieron sus vidas en las luchas contra el poder injusto de gamonales, por reivindicar la tierra y justicia a los campesinos; sembrar flores por sus dirigentes que ofrendaron sus tiempos y vidas hasta dar tierra y algo de justicia a las comunidades campesinas, campesinos y pueblos. Seguramente, bajo la responsabilidad de hombres y mujeres de los años de 2010-2030; el 11 de abril de 2047, la gloriosa CCP celebrará su centenario, porque ese día habrá cumplido 100 años de su existencia.