Se requieren por los menos 250 millones de soles para enfrentar emergencia agraria

2007-04-06 00:00:00

* Mientras el agro agoniza sin recursos, el gobierno aprista protege “shock de corrupciones”
* La corrupción se lleva millones de dólares y al agro dan apenas seis millones de soles

Mientras el agro agoniza en ocho regiones del país, víctima de los desastres climáticos y los fenómenos naturales, y requiere urgente recursos para salvarse, el Apra de Alan García y la derecha neoliberal que gobiernan el país, no solo le niegan los recursos que necesita sino que se dedican a proteger las mafias que han convertido el famoso anuncio de “shock de inversiones” en un vergonzante “shock de la corrupción”.

Entre los meses de enero y febrero, la agricultura de los departamentos de Huancavelica, Junín, Ayacucho, Apurímac, Puno, Pasco, Huanuco y Cusco, sufrió las consecuencias de las heladas, granizadas, veranillos y lluvias e inundaciones en otros caso. Pero estos desastres, agravados por el cambio climático desnudan también la precariedad de los sistemas de pequeña producción agropecuaria, que ha sido totalmente abandonada por los gobiernos de turno, sobre todo por los últimos de Fujimori, Toledo y García.

Y mientras en Lima, la prensa da cuenta de toda la danza de millones que se lleva el “shock de la corrupción” que el gobierno aprista protege, el agro del que viven millones de productores demandan urgente ayuda urgente para superar esta grave situación. Se calcula inicialmente los daños en unos 250 millones de soles, pero lo que el gobierno dispone no llega ni a los 6 millones de soles.

En efecto, el ministerio de Agricultura y el Instituto Nacional de Defensa Civil, INDECI, han solicitado fondos por apenas Cinco millones 926 mil soles (S/. 5’926,177.00), cifra a todas luces insuficiente, como lo ha señalado también la congresista ayacuchana, Juana Huancahuari. Además, hay que indicar que estos recursos están tardando en llegar a los beneficiarios por la inercia y la burocracia que caracteriza a las autoridades respectivas.

Frente a esta situación, la Confederación Campesina del Perú, CCP, exige al gobierno no solo atender las demandas urgentes de los agricultores con una partida de 250 millones sino que se reconsidere una mayor inversión pública en estos ocho departamentos, para recuperar el capital y la infraestructura social y productiva, así como implementar programas sostenidos para el desarrollo integral de la pequeña agricultura.

Las primeras cifras de los daños

Los primeros cálculos que han llegado hasta la CCP sobre los daños causados por los fenómenos climáticos son preocupantes, no solo por la dimensión que alcanzan sino porque generalmente, estas emergencias traen una serie de secuelas cuyas consecuencias se ven en los meses posteriores. Además, estos cálculos son solo de la base productiva y no consideran los daños de tipo social que la situación provoca.

Por lo demás, esta situación de emergencia que afronta el agro de estas regiones del país, la mayoría de la sierra andina, no hará sino agravar la situación de pobreza y extrema pobreza en que viven cientos de miles de familias campesinas y pequeños productores agropecuarios. Al mismo tiempo, pone en evidencia una vez la necesidad de que la pequeña agricultura cuente con un seguro agrario que proteja a los productores y campesinos de estas contingencias.

Ayacucho: más del 75 % de cultivos destruidos

Uno de los departamentos que ha sido más duramente golpeados por los desastres climáticos ha sido Ayacucho, también uno de los más pobre del país. Según la información de la Federación Agraria Departamental de Ayacucho, FADA, el 75 por ciento de los cultivos han sido destruidos por lo que se consideran la peor temporada de heladas de los últimos 14 años.

Los cultivos que fueron afectados seriamente son la papa y el maíz, así como otros cultivos andinos, en diversas provincias que comprometen la precaria economía de los campesinos de las zonas altoandinas. Solo en papa, se calculan que habrían perdido unas 16 mil hectáreas. Según los datos que maneja la oficina de la Congresista Juana Huancahuari, los daños en Ayacucho superan los 58 millones de soles; por ello, lo que se ha destinado, apenas 1 millón 270 mil soles es una cantidad insignificante.

Actualmente, la FADA de Ayacucho, viene recibiendo y centralizando la información que sigue llegando desde las diferentes provincias sobre la magnitud de los daños de lo que es considerada una de los peores desastres de la agricultura en los próximos años. El presidente colegiado de la FADA Edgar Capcha Condori, viene realizando una serie de gestiones ante diversas instancias públicas y privadas para buscar una mayor ayuda para afrontar esta difícil situación que atraviesan los pequeños productores y campesinos ayacuchanos.

En Junín se han perdido más de 6 mil hectáreas

Si en Ayacucho la situación es dramática y preocupante, no lo es menos en la región central, en el departamento de Junín, donde las provincias de Jauja, Chupaca, Tarma, Huancayo y Concepción, han sido las más afectadas.

Según las cifras que maneja la Federación Departamental de Campesinos e indígenas de Junín, FEDECIJ, así como la misma Dirección Regional Agraria, por lo menos 6 mil hectáreas han sido prácticamente destruidas; en tanto que más de 33 mil hectáreas han sido afectadas parcialmente.

Los cultivos más afectados han sido los de papa pues por lo menos el cincuenta por ciento del total de hectáreas se ha perdido. De las 5,675 hectáreas sembradas, se habrían perdido 3 mil 200 hectáreas; en tanto que el valor de la pérdida alcanzaría a unos 8 millones de soles. Otro cultivo más afectado es el maíz choclo, pues de las 9 mil hectáreas sembradas, se han destruido unas 2 mil 600 hectáreas, con daños por cerca de cinco millones de soles.

En lo que se refiere a maíz amiláceo, se han perdido casi la totalidad de los cultivos, es decir, unas 480 hectáreas, con daños valorizados en unos 600 mil soles. En otros cultivos andinos como olluco y arvejas, los daños llegan a los 200 mil soles, y han afectado a más de 200 hectáreas.

Las zonas más afectadas por las heladas y veranillos son Huayao, Viques, Ingenio, Juan de Jarpa, Runatullo, Ricran, Jauja, Santa Ana, Hualahoy, Huasahuasi, Sapallanga, Huayucachi y toda la zona del Canipaco. Tal como sucede en Ayacucho, los dirigentes de la FEDECIJ, han expresado su protesta y preocupación por los pocos recursos que se han destinado para afrontar esta situación.

Por ello, vienen demandando que se haga una nueva evolución de los daños y que desde el gobierno regional y central se tomen las decisiones del caso y se destinen los recursos suficientes para afrontar la emergencia. Hay que destacar que a la escasez de alimentos que se presentará en los próximos meses, también se sumará la falta de semillas y otros insumos necesarios para recuperar el potencial productivo de este departamento. Asimismo, la FEDECIJ no descarta tomar medidas de protesta si es que no hay respuesta del gobierno.

Otros departamentos olvidados

Las medidas dispuestos por el gobierno, además de ser lentas, insuficientes e ineficaces frente a la dimensión de los daños, expresan además el total desconocimiento del agro andino. Si bien estos ocho departamentos han sido los más afectados, no todos han sido comprendidos en la emergencia agraria, solo algunas provincias de Huancavelica, Junín, Ayacucho y Puno.

Departamentos como Cusco, por ejemplo, no han sido comprendidos en la declaratoria de emergencia agraria; lo mismo sucede con Pasco y Huanuco, donde también los daños son considerables, pero el gobierno los ha excluido. Por ello, el director de Agricultura de Pasco, Manuel Guadalupe, han demandado al gobierno que los incluya en los alcances del DS 014-2007 que declaró la emergencia agraria.

Según este funcionario, en Pasco, unas 4 mil hectáreas se han perdido por causa de las heladas, granizadas y las fuertes lluvias. Los daños más significativos han sido en los cultivos de papa, lo que afecta parcialmente a las más de 8 mil hectáreas de la presente campaña sobre todo en las provincias de Pasco y Daniel Alcides Carrión.

En lo que se refiere a Cusco, la secretaria general colegiada de la CCP, Marcelina Vargas, informó que las zonas más afectadas son las denominadas Provincias Altas, que comprende a Espinar, Canas, Canchis y Chumbivilcas. Remarcó que en la provincia de Canas han sido afectados sobre todo los cultivos de papa y cereales andinos. Informó que tanto la federación departamental como la provincial de Canas, vienen centralizando la respectiva información.