2006-12-08 00:00:00

COCHABAMBA, Bolivia (Reuters) - Líderes campesinos de Latinoamérica unirán su voz este fin de semana en Bolivia para pedir a los mandatarios del continente, reunidos en la II Cumbre de la Comunidad Sudamericana de Naciones, respaldo para despenalizar la hoja de coca.

La propuesta será incluida en una declaración de las organizaciones reunidas en la Cumbre Social de los Pueblos, que se celebra paralelamente a la Cumbre Sudamericana, que congregará el viernes y sábado a la mayoría de presidentes de la región en la ciudad boliviana de Cochabamba.

"Estamos debatiendo sobre la revitalización de la hoja de coca y sobre la manera de conseguir la despenalización de este producto, un reclamo que consideramos más que justo," dijo a Reuters Juana Ferrer, representante campesina de República Dominicana.

La Cumbre Social, celebrada desde el miércoles también en Cochabamba, buscará el apoyo de los gobernantes para que la Organización de Naciones Unidas (ONU) retire a la coca de una lista de sustancias penalizadas, un pedido que el propio presidente Evo Morales hizo ante la asamblea del organismo en septiembre.

Morales, quien inició su carrera como dirigente de los sindicalistas cocaleros, impulsa un plan de industrialización a gran escala de la planta coca que incluye un polémico control de la cantidad de los cultivos en Bolivia, tercer productor mundial de este rubro.
En una pequeña protesta en Cochabamba, campesinos llamaron a defender el cultivo tradicional de la coca y culparon al presidente de arrebatar su sustento mediante el plan de erradicación de los cultivos excedentes, impulsado por Estados Unidos para frenar el narcotráfico.

"La coca no es cocaína. La coca es nuestra hoja sagrada," dijo Alfredo Rojas, de 24 años y campesino de Yungas Bandiola, al norte de La Paz, mientras cargaba una planta cortada que dijo tenía 150 años y que calificó como víctima de una política de erradicación que calificó como "absurda."

En la cumbre social, más de medio millar de delegados de 12 países disertan sobre la construcción de un nuevo modelo de desarrollo que favorezca la equidad y sobre la urgencia de articular políticas que garanticen la seguridad alimentaria.

"A diferencia de otros foros, este no es de confrontación. Por la coyuntura que vivimos tras la instalación de gobiernos de izquierda en muchos de nuestros países, esta reunión se ha convertido en un espacio de diálogo," dijo el sindicalista venezolano Eduardo Piñate.

En la entrada del Instituto Americano de Cochabamba, sede del foro, caricaturas de Morales, del presidente cubano Fidel Castro y del recién reelecto mandatario izquierdista venezolano Hugo Chávez se exhibían junto a retratos del revolucionario argentino Ernesto "Che" Guevara.

"Evo, Chávez, Fidel, nuestro norte es el sur," se leía en algunas pancartas. Otros carteles rechazaban los Tratados de Libre Comercio (TLC) que algunos países sudamericanos como Colombia y Perú negocian con Estados Unidos.