Biólogo Fidel Torres demanda que Estado defienda áreas protegidas

2006-11-22 00:00:00

La pretensión de iniciar actividades mineras en las nacientes de las principales cuencas, constituye una seria amenaza al presente y futuro económico y productivo de la región de Piura, ya que las áreas de los denuncios mineros afectan todo el agroecosistema que posee una alta biodiversidad que es el capital mundial que los países desarrollados quisieran tener.

Así lo advirtió el director ejecutivo de Inkagro-Piura, biólogo Fidel Torres, durante una exposición que realizó durante la Escuela Campesina que se realizó en Vice-Piura, en la que analizó la crisis mundial del agua y las consecuencias de que la minería metálica se instale en este departamento norteño. “No hay convivencia posible entre la minería y el futuro económico de Piura pues ello significaría la pérdida de las oportunidades presentes y futuras de la región”, remarcó.

El especialista alertó que la actividad minera que pretenden realizar las empresas Majaz y Newmont está ubicada en ambos flancos de la cordillera piurana donde ubican las nacientes de los ríos Piura, Quiroz y Huancabamba. Además hoy otros denuncios mineros en los distritos de Paimas, Suyo, Las Lomas, entre otros, lo que afecta todo el sistema agraria del departamento.

Es importante remarcar que Piura es una región en la que el Estado ha hecho grandes inversiones para el desarrollo agrario, que depende de la disponibilidad de agua en cantidad y calidad. Además, esta región cuenta con importantes ventajas competitivas que le permiten conectarse con los mercados internacionales de productos orgánicos, y por lo tanto, su futuro depende de cómo se maneje el agua, recurso que ha sido declarada en crisis a nivel mundial.

En tal sentido, Fidel Torres destacó las grandes posibilidades agrícolas que tiene Piura por su clima, sus sistemas hídricos, sus nacientes que además de ser fuentes de captación y distribución de agua, son zonas de alta biodiversidad que muchos países desarrollados quisieran tener. Agregó que “Todo ello está a punto de perderse por las pretensiones mineras que el propio Estado peruano las ha prohibido”.

Estado debe defender áreas protegidas

Fidel Torres se refirió también al hecho de que el área donde se ubica Ayabaca y Huancabamba, ha sido declarada como zonas prioritarias de conservación por el Sistema Nacional de Áreas Protegidas por el Estado, que expresamente ha prohibido que haya actividad minera. “Por lo tanto, todo está a favor de las comunidades campesinas de Ayabaca y Huancabamba para que hagan respetar sus derechos”, enfatizó el director de Inkagro-Piura.

Por lo tanto, en el conflicto que se presenta con la minera Majaz, el Estado peruano tiene que ser consecuente con lo que dictaminan sus órganos técnicos y científicos y apoyar la exigencia de las comunidades de estas provincias andinas de Piura que exigen el retiro de la empresa minera Majaz.

Por ello, es importante también destacar el apoyo de sectores sociales importantes del departamento que han comprendido la seria amenaza que constituye la actividad minera metálica en Piura, y que se vienen movilizando para apoyar a las comunidades de Ayabaca y Huancabamba que buscan ejercer sus derechos y defienden el futuro y la vida misma de este departamento norteño.