Los recursos naturales tienen una gran importancia estratégica para el desarrollo de los países y los pueblos, por los servicios ambiéntales que ofrecen gratuitamente y porque su valor está más allá del precio que les quiere asignar el mercado; y además porque de ellos depende la supervivencia humana. Así lo sostuvo la ecologista Ivonne Yáñez, representante de Aprodeh, durante su participación en la II Escuela Nacional Campesina que organizó la CCP.

Durante su exposición, destacó que por la presión que el actual modo de producción somete a los recursos naturales, ya ni siquiera se puede hablar de la tradicional clasificación que se les hacía de renovables y no renovables. Muchos de estos recursos que eran considerados renovables como los bosques o el agua, han dejado de serlo, y su impacto ya se siente en el cambio climático, aunque pueden llegar a ser impredecibles.

Ivonne Yáñez, remarcó también que la propiedad de los recursos naturales se ha concentrado en pocas manos, como son las corporaciones transnacionales propietarias de yacimientos mineros y de hidrocarburos; otras se apropian del conocimiento y la biodiversidad, controlan las semillas y pugnan por los derechos del agua, ocupan indiscriminadamente la atmósfera y contaminan ríos y océanos.

Sin embargo las poblaciones de los países que son las verdaderas dueñas de estos recursos, son las que sufren las consecuencias de la pobreza, la miseria y la exclusión, tal como lo demuestran diversos índices de desarrollo humano. La especialista en temas ambientales, señaló que países como el Perú –que poseen gran riqueza natural- ocupa el puesto 79 en desarrollo humano, la expectativa de vida es de 69.8 años, mientras que en Japón es de 82; el nivel de analfabetismo es de 14 por ciento, mientras que en Cuba ha sido erradicado; en calidad de agua el Perú ocupa el puesto 69, frente a Argentina que tiene el puesto 13; y en materia de educación apenas se destina el 3 por ciento del PBI –en Chile es 10%- y en salud el 2.2 por ciento, frente al 6.7 de Colombia.

Frente a esta realidad, es que vienen surgiendo nuevas tendencias que apuntan a la nacionalización de los recursos naturales, a la revisión y formulación de nuevos contratos con las transnacionales, a la creación de empresas regionales; así como la demanda de nuevas políticas de desarrollo en las que confluyen el movimiento social y los nuevos gobiernos que cuestionan el modelo neoliberal, sostuvo Ivonne Yáñez.

ALGUNOS IMPACTOS DEL CAMBIO CLIMÁTICO

• Menos productividad agrícola

• El clima es impredecible, con probables mayores y frecuentes olas de calor y frío.

• Más y más fuertes tormentas, vientos huracanados, tifones, etc. y su aparición en lugares donde ante son existían

• Más lluvias, inundaciones o sequías en donde antes no había

• Crisis de acceso a agua para consumo humano, agricultura, etc., por la desaparición de los glaciares.

• Aumento de enfermedades tropicales, y mayor incidencia y expansión de enfermedades antes desconocidas. La OMS estima que los cambios climáticos están cobrando la vida de 150.000 personas al año.

• Aumento del nivel de los océanos, por el deshielo de los cascos polares, pueblos enteros cubiertos por el agua

• Desalinización de los océanos, baja de la pesca.

• Extinción masiva de animales y plantas.

• Desplazamiento de campesinos y millones de refugiados ecológicos.