Raúl Wiener afirma que resultados revelan trasfondo político y social
Raúl Wiener afirma que resultados revelan trasfondo político y social
Triunfo del Apra fue la revancha de la derecha
Para el economista y analista Raúl Wiener, los recientes resultados electorales revelan un trasfondo político y social, donde hay mucho más que dos bloques confrontados; y por lo tanto, el reto de Alan García es cómo maneja la relación con estos sectores. Sostiene también que el triunfo aprista es producto de la revancha de la derecha que tras perder la batalla por ser gobierno, decidió apoyar al Apra.
“Esquemáticamente podemos decir que la derecha, que aseguraba el continuismo, perdió la batalla por ser gobierno. Pero en revancha ha dado su apoyo, a través de sus principales voceros que son los grandes medios de comunicación, al candidato del segundo sector, para que cierre el paso al tercero. Todo lo que viene ahora es saber cómo maneja García la relación con los suyos, con sus aliados de la elección y con los perdedores que sin embargo han sido la principal preocupación de la campaña, y lo van a seguir siendo si se quiere alcanzar algún grado de estabilidad para los siguientes años”, señala Wiener.
Con relación a los actores que se expresaron en las elecciones el analista señala que van más allá de los “modernos” y “tradicionales”, como se pretende ver. Agrega que lo que se llama moderno también está fracturado y con enormes rivalidades. “La derecha de Lourdes Flores, lidera a la parte del país que se siente parte del actual crecimiento y de la opción exportadora que se impone sobre el resto. Son lo que no quieren que cambie la regla, que dicen que hay que darle un poco más a lo social, siempre que no toque sus beneficios. Tienen su fortaleza en Lima. Y son los que ven como amenaza los cambios políticos que están aconteciendo en el plano continental”.
Agrega que, “El Apra de García, que es la encarnación política de esa parte de la sociedad que siente que está participando insuficientemente del modelo y que exige que la regla se ensanche para tener también una cuota del beneficio. Territorialmente se localizan en la costa norte y en el sur medio (Ica), que son los departamentos en dinámica exportadora, que sin embargo no están pagando lo que deben a los trabajadores, ni remunerando a los pequeños proveedores y comerciantes en el circuito de la exportación, ni financiando adecuadamente los gobiernos regionales y municipales, donde se ubica el funcionariado aprista. Una vez en el gobierno, el APRA tiene que responder por esto, pero al mismo tiempo por su nuevo compromiso con la derecha política y económica, y ahí van a empezar los problemas”.
Y, destaca Wiener, “Finalmente, están los que sienten que no tienen lugar en el actual crecimiento, en sus ganancias y en sus decisiones. Humala ha venido a tomar sus banderas, no sé con cuanta conciencia inicial, pero sin duda han ido comprendiendo que el lenguaje rudo con los otros sectores es el que mejor representa el estado de ánimo de esta gente. Lo que busca este sector son reglas totalmente distintas. Comprende más de dos tercios de la superficie del país y casi la mitad de los peruanos. Esta elección podría significar el nacimiento del partido de los descontentos que levantan una olla”,
En este contexto, la elección del 4 de junio marca el comienzo de cosas importantes, en el que García debe confirmar que puede crear un sistema político viable de cara a los resultados electorales, a un parlamento sin mayoría, a una derecha suspicaz, y a una presión social para que cumpla sus promesas. De igual manera, remarca Wiener, falta sabe si Humala afirma su proyecto para las elecciones regionales y municipales y se pone al frente de una oposición parlamentaria y popular, y plantea desafíos al nuevo gobierno como la restitución de la Constitución de 1979, la revisión de los contratos con las transnacionales, la implementación de las reparaciones recomendadas por la Comisión de la verdad, entre otros.