Propietaria de Yanacocha, además de contaminar estaría vinculada a la corrupción

2005-11-17 00:00:00

La mafia de Alberto Fujimori y Vladimiro Montesinos no tuvieron escrúpulo alguno, y sus tentáculos alcanzaron y corrompieron no solo el ámbito político sino también el empresarial y sobre todo, apuntaron a las grandes empresas transnacionales. Una reciente investigación del diario norteamericano New York Times, revela que la empresa Newmont, propietaria de la minera Yanacocha también pagó al corrupto gobierno fujimontecinista por los favores que recibió para explotar los yacimientos de oro de Cajamarca y por las grandes facilidades tributarias.

Cabe indicar que una denuncia en este sentido fue desechada por el inepto poder judicial peruano, cuestionado por las sospechas de seguir bajo la influencia de la mafia fujimontecinista. Sin embargo, en los propios Estados Unidos, han continuado las investigaciones periodísticas, las mismas que no hacen sino confirmar que para apoderarse de Yanacocha, la Newmont, no tuvo reparos en recurrir al corrupto y hoy preso ex asesor y mano derecha de Fujimori.

La investigación del diario norteamericano tomó como referencia uno de los “vladivideos” que se difundieron en el que los funcionarios de la empresa Newmont negocia facilidades con Montesinos no solo para obtener grandes beneficios económicos sino para dejarle las manos libres para que su actividad minera arrase con los derechos del pueblo y campesinado cajamarquinos.

Frente a estas revelaciones del New York Times, diversas organizaciones campesinas y ambientalistas, están demandando que el poder judicial retome las investigaciones que fueron alegremente archivadas hace algunos años. Las revelaciones y nuevos indicios que aporte la investigación periodística ameritan reabrir el caso y determinar las responsabilidades y sanciones para los funcionarios de la empresa Newmont, de origen estadounidense.

La empresa minera ha sido protagonista de una serie de conflictos con la población y las rondas campesinas de Cajamarca, quienes se han enfrentado no solo a la contaminación que genera la minería sino a los intentos de seguirse apropiando de nuevos recursos como fue el caso del cerro Quillish, principal fuente de agua que beneficia a la población y a la actividad agropecuaria en la región. También ha sido denunciada en tribunales internacionales por la contaminación con mercurio de las aguas de un río en la localidad de Choropampa. Esta es una nueva denuncia por la que debe responder el prófugo que hoy se escuda cobardemente en su nacionalidad japonesa para evadir la acción de la justicia.