2005-09-06 00:00:00

El X Congreso Nacional de la Confederación Campesina del Perú, CCP, que se realizará en Lima los días 22, 23, 24 y 25 de noviembre del presente año, ha entrado a la recta final en su proceso de organización. Durante la historia de la CCP, diversos congresos nacionales definieron el rumbo que tomó la lucha del movimiento campesino en sus diferentes etapas. Este X Congreso, se realizará también en un momento crucial no solo para el movimiento campesino y agrario, sino para el destino del país; de allí la importancia que reviste y la necesidad de comprometernos desde nuestras bases comunales, distritales, provinciales y departamentales para garantizar su éxito.

El X Congreso se convoca en momentos en que el agro y la pequeña agricultura en particular atraviesan una de las peores épocas, como producto de la implementación de las políticas de ajuste estructural, es decir del neoliberalismo, que empezó a aplicar con todo su salvajismo el régimen corrupto de Alberto Fujimori, y que desgraciadamente ha continuado aplicando Alejandro Toledo. El agro está abandonado, sin crédito, ni ayuda técnica, con precios que llevado a la ruina a los campesinos y pequeños productores, sometido a la competencia desleal y a la invasión de los productos agrícolas importados; y las comunidades sometidas al saqueo de las empresas mineras transnacionales que destruyen con su voracidad sus recursos naturales.

Asimismo, el máximo evento organizativo de la CCP se convoca en momentos en que el gobierno de Alejandro Toledo, persiste en pasar a la historia como uno de los más claudicante ante la hegemonía del imperialismo norteamericano, al persistir en la firma de un Tratado de Libre Comercio, TLC con los Estados Unidos, que no solo terminará por exterminar la pequeña agricultura campesina, sino que despojará al país de la poca soberanía que aún defendemos el movimiento campesino y social.

Pero este congreso se dará también en una coyuntura prácticamente electoral, en el que los partidos políticos de la derecha y otras fuerzas conservadoras como el Apra buscan llegar al poder tan solo para seguir manteniendo vigente este modelo neoliberal y la globalización excluyente, que consolida el poder las empresas transnacionales y de sus testaferros nacionales, mientras que condena a la pobreza y extrema pobreza a millones de peruanos del Perú Profundo y de los sectores marginales urbanos populares.

Sin embargo, es importante remarcar que nuestro congreso se realizará en un contexto en el que a pesar de sus dificultades de centralización y dirección política, el movimiento social no se resigna a los embates del gobierno y del neoliberalismo, sino que resiste y retoma sus luchas por la defensa de sus derechos sociales que pretenden ser desaparecidos por las políticas impuestas por el FMI, el Banco Mundial y la OMC que solo favorecen el brutal enriquecimiento de las empresas transnacionales. Hay que remarcar que estas luchas de resistencia al neoliberalismo no se dan solo en los confines de nuestro territorio nacional, sino que se expanden en otros países hermanos como Bolivia, Ecuador, Venezuela que no solo resisten sino que se empeñan a mostrar que sí hay alternativas al modelo neoliberal y salvaje.

Es en este contexto que se realizará nuestro X Congreso Nacional, que tendrá que debatir sus propuestas programáticas y políticas para responder a este momento histórico que vive nuestro país y el movimiento campesino. Por ello, hoy más que nunca, este movimiento organizado bajo las gloriosas banderas de la CCP, desde las más recónditas comunidades campesinas, desde sus federaciones distritales, provinciales y departamentales, deberá contribuir a gestar las propuestas para responder a los retos que nos plantea la hora histórica que vive nuestro país y los millones de campesinos y pequeños productores.

Por ello, desde la dirección nacional, saludamos el proceso de organización del congreso que se impulsa desde nuestras bases y llamamos a profundizar el debate sobre los temas que abordará nuestro evento nacional. Solo una participación activa, protagónica, consciente y colectiva, en la que nuestros dirigentes de todo nivel, mujeres, varones, jóvenes, contribuyan con sus propuestas programáticas, políticas, productivas, tecnológicas, económicas, culturales, enriquecerá nuestro congreso nacional y lo llevará a marcar el camino que debemos emprender para seguir escribiendo la historia de la principal organización campesina del país en la defensa de nuestras comunidades y de la pequeña agricultura.

Llamamos también a contribuir a este debate a los profesionales e intelectuales vinculados a la problemática agraria y así como a las organizaciones campesinas, pues es importante no solo mantener y retomar esta relación histórica con la CCP sino, hoy más que nunca unir esfuerzos pues buena parte del futuro del país se juega con el desarrollo de la pequeña agricultura y las comunidades campesinas.

En momentos en que el arrollador y brutal desarrollo del modelo neoliberal está llevando al mundo a una destrucción de sus recursos naturales y de sus fuentes productivas; en esta etapa en que la voracidad de las transnacionales y el imperialismo imponen su poder a sangre y fuego; hoy que está nuestro país está en riesgo frente a un TLC que destruye nuestra soberanía nacional, requerimos forjar, consolidar y contribuir a crear los instrumentos organizativos, sociales y políticos para seguir luchando por un nuevo Perú, con justicia y equidad en el campo; por ese Perú nuevo dentro de un mundo nuevo que tanto demandó José Carlos Mariátegui y por el que empezó a luchar Túpac Amaru, cuyos sueños iluminan el camino de lucha de nuestra la gloriosa CCP.