En Apurímac
Diversas organizaciones de afectados por la violencia política de Apurímac, han planteado profundizar las investigaciones sobre la existencia de fosas sobre todo en la provincia de Aimaraes, donde tuvieron activa presencia bases militares y policiales durante la época de la violencia. En diciembre del año pasado, diversas organizaciones como Aprodeh, el CDH de Abancay, Adifa, Refinfa, Defensoría del Pueblo y otras instituciones vinculadas la defensa de los derechos humanos, propiciaron un primero proceso de exhumaciones en la comunidad de Capaya.
Durante estos trabajos que duraron diez día se encontraron se abrieron varias fosas comunes en las que encontraron restos óseos humanos, ropa quemada y casquillos de bala. En una fosa en la zona de Chaupiorcco, se encontraron también restos de cinco personas con signos evidentes de haber sido torturados y ejecutados con disparos de bala. Todos estos trabajos se hicieron con presencia de decenas de familiares de personas desaparecidas de los distritos de Toraya, Sañayca, Amoca, Huayrapampa y de la misma comunidad Capaya.
Aunque el fiscal de Aimaraes dijo que los restos encontrados no eran de la época de la violencia política, los familiares han demandado que se profundicen las investigaciones y se ordenen nuevas exhumaciones. Ellos manifiestan que existen otros lugares de entierros clandestinos que hicieron los militares y que algunos campesinos no revelan por temor a represalias. (Gonzalo Pérez Ch. Corresponsal Abancay).