La FDCP realizó un exitoso IX Congreso:

2004-07-07 00:00:00

En medio de uno de los inviernos más crudos y con las temperaturas más bajas de los últimos 75 años, se realizó exitosamente en la ciudad de Puno, el IX Congreso Ordinario de la Federación Departamental de Campesinos de Puno (FDCP), los días 16, 17 y 18 de junio, en el Coliseo deportivo de la Universidad Nacional del Altiplano, ubicado en las riveras del lago Titicaca. Es de destacar que este evento congresal, también concentró la atención de los principales medios de comunicación regional y local (radio y TV), muchos de los cuales trasmitieron en “vivo y directo”, el desarrollo del congreso.

UN CONGRESO REPRESENTATIVO Y CON PROFUNDA VISION POLITICA

La presencia de 537 delegados plenos y más de 60 fraternos de todas las 13 provincias puneñas, expresaron la representación de la organización más importante del movimiento campesino de la región y quizás del sur andino, que volvió a reunirse después de 4 años, cuando en ese entonces, en la provincia de Chucuito (en la cuidad de Juli), realizara su VIII Congreso, en diciembre del año 2000.

Lo primero que demos señalar, de este trascendental evento, es el hecho de que el IX Congreso de la FDCP, ha tenido como centro el análisis y la necesidad de tejer alternativas a la actual crisis de gobierno y régimen político que vive el país y la región; así como formular propuestas a un agotado modelo económico neoliberal, que constituye la causa principal de la crisis que vive el Perú y las regiones del interior del país.

En otras palabras, al igual que en el segundo lustro de la década de los 80, cuando las comunidades campesinas lideradas por la FDCP recuperaron casi dos millones de hectáreas y arrinconaron al gobierno del corrupto Alan García; hoy, en el primer lustro de la primera década del tercer milenio, en medio de un intenso proceso de recuperación gremial, el movimiento campesino y la FCDP, se vuelven a dotar de orientaciones y de capacidad organizativa, para enfrentar los nuevos retos que demanda la lucha contra el modelo neoliberal, el centralismo, y contra una globalización excluyente que se expresa en el intento de imponernos el TLC por parte del gobierno de Toledo y de Bush.

Por ello, en este evento congresal, el campesinado altiplánico, aymara y quechua, han reafirmado su decisión de que están prestos a intervenir - con voz y fuerza propia - en la actual situación de crisis que vive la región y el país. Por estas mismas razones han anunciando, al igual que la CCP, que estarán en primera fila en el Paro Nacional del 14 de julio; aunándose a las voces del Perú profundo de que se vaya Toledo, levantando la propuesta de acumular fuerzas para conquistar Un Nuevo gobierno con poder para Peruanizar el Perú y descentralizar el país.

LA PRESENCIA DEL ESPIRITU DE LAS LUCHAS DE ILAVE

Por otro lado, desde la problemática más regional, la lucha del pueblo y las comunidades campesinas aymaras de Ilave estuvo presente en el corazón del IX congreso de la FDCP, al constituir también un espacio de encuentro entre el movimiento campesino regional puneño y la rebelión desatada por el pueblo y las comunidades campesinas de Ilave, cuyos voceros oficiales se hicieron presentes en el congreso, dando ha conocer a sus hermanos campesinos de las otras provincias, las razones de su lucha.

En medio del fragor de la lucha del pueblo y de las comunidades campesinas de Ilave, que han remecido la región y el país, el X Congreso de la FDCP, ha señalado, que para que esta lucha de resistencia que ya tiene mas de tres meses de duración (abril-julio), se transforme en una contundente victoria, es indispensable, adoptar estrategias comunes - que sin negar lo local- busquen que las luchas del pueblo de Ilave se incorporen a luchas del pueblo de Puno y del conjunto del país.

Los problemas de Ilave, han puesto en cuestión los límites de la democracia representativa ante un régimen político nacional, regional y local que no tiene la capacidad para canalizar las demandas de democracia participativa de los pueblos; y tienen su origen en una política agraria y rural neoliberal, que ha abandonado el agro Ilaveño y está a espaldas a las demandas de las comunidades campesinas de esta zona altiplánica.

Por ello mismo, aparte de los lamentables sucesos que acabaron con la vida del ex Alcalde Cirilo Robles, es necesario tomar conciencia que los verdaderos problemas del pueblo campesino de Ilave, son democráticos y de desarrollo agrario y rural, es decir, que tienen las mismas raíces que tienen los problemas de los pueblos campesinos de Puno y del país.

EL PRINCIPAL LOGRO DEL CONGRESO: La construcción de un movimiento con visión regional y nacional

Una primera conclusión que nos deja el evento, es que la importancia de este IX Congreso de la FDCP tenemos que ubicarla no sólo por el contexto político en que se ha realizado, sino que radica también en la calidad del debate de los principales problemas del agro puneño y nacional, en los importantes acuerdos adoptados, y en la ratificación de la voluntad política para transformar la actual situación de la región y del país.

Sin embargo, si bien el IX Congreso, ha dado curso y paso a la forja de un movimiento campesino con vocación regional que se ubica como parte constitutiva de una fuerza nacional campesina y popular, para buscar salidas a la crisis de vive el país, también es cierto, que en el movimiento campesino puneño, todavía persiste – aunque cada vez con menos fuerza- un espíritu localista disgregador, que pone en segundo plano la unidad y fuerza regional y nacional, y que erosiona a los organismos de dirección regional de la FDCP.

El IX congreso de la FDCP, después de su inauguración, instalación, aprobación de su reglamento y elección de la mesa directiva, que estuvo presidida por el compañero Rene Pacheco, de la base de Azángaro, dio curso al debate sobre la situación política - económica nacional y sobre las características de la reactivación de vigoroso movimiento social que también esta en curso en país, en particular en los escenarios regionales de la sierra y la selva, donde el movimiento campesino y agrario tiene particular incidencia.
Se hizo hincapié que a pesar de sus debilidades de centralización y de falta de representación política para canalizar sus demandas en plano político, este movimiento se encuentra en ascenso y tiende cada día a extenderse a lo largo y ancho del país; lo cual hace más urgente y perentoria la necesidad de avanzar en la solución de dichas dificultades. Las fuerzas sociales y políticas que están por el cambio, por la profundización de la transición democrática, así como por abrir la transición económica, tienen que concentrar sus esfuerzos en la solución de esta compleja problemática.

En ese sentido la convocatoria al paro nacional del 14 de julio, por la GCTP, Frentes Regionales y la CCP, constituye una adecuada decisión por centralizar y unificar las luchas del pueblo peruano. De ser triunfante y victoriosa esta medida de lucha nacional nos abrirá un nuevo rumbo para la lucha por un nuevo gobierno con poder que retome una auténtica transición democrática.

Esta ponencia estuvo a cargo del compañero Víctor Torres, quien a nombre de la CCP, sustentó la resolución que se acordó en la Conferencia Nacional Campesina, que se realizo afines de mayo del presente año.

Concluido el examen y el debate de la situación nacional, se dio paso al balance de la situación que vive la región de Puno, a través de una mesa que estuvo conformada por representantes políticos regionales. Por el Poder Democrática Regional (PDR) disertó el doctor Alberto Quintanilla; por el APRA, el Secretario General de la Región de Puno, Tomas Cenzano; y por la organización política regional “Perú Libre y Solidario”, Mauricio Rodríguez.

Es de hacer notar que tanto en las exposiciones sobre la situación nacional y regional, las causas e impactos de la lucha del pueblo y de las comunidades campesinas de Ilave, merecieron un lugar central en dichas ponencias, lo que reveló la importancia que esta lucha tiene para el movimiento campesino peruano, así como para el movimiento campesino del altiplano y para la región de Puno. Este tipo de enfoque se enriqueció con el informe y balance que presentó el compañero Rufino Vidal, a nombre de las comunidades campesinas de la provincia de El Collao (Ilave).

Indudablemente, que las exposiciones sobre todos estos temas, contribuyeron a analizar adecuadamente tanto el contexto nacional como regional; permitiendo su vez, que las delegaciones asistentes al congreso, cuenten con aportes y variados elementos de juicio, no sólo para analizar los temas en referencia, sino también los demás puntos de agenda.

A MANERA DE CONCLUSION

Este IX Congreso de la FDCP, cuyo espíritu combativo y de esperanza quedó reflejada en la gran movilización por las calles de la ciudad de Puno con la que se inicia el evento, ha constituido uno de los mayores éxitos del movimiento campesino en los últimos años, no sólo por su representatividad sino porque ha permitido retomar un debate profundamente político y propositivo de la situación del agro regional y del país.

La masiva participación de más de medio millar de delegados de todas las trece provincias, permitió un profundo debate ha marcado la reubicación de la lucha política del movimiento campesino en la región y que tendrá repercusiones en el contexto nacional, pues en otros departamento y provincias se vienen preparando eventos congresales que fortalecerán el movimiento campesina y la organización de la CCP.

El análisis y la valoración de las luchas del pueblo de Ilave que han marcado el espíritu de este congreso, ha permitido vincular la problemática regional a lo nacional. Esta comprensión hizo que el congreso adoptara la tesis de que la actual crisis del gobierno, del régimen político y del modelo económico, parten del escenario nacional y del poder central y se extienden con rapidez a los escenarios regionales; y desde allí, se retroalimentan hacia los espacios nacionales.

La aprobación de la Plataforma Agraria de la FDCP, del pronunciamiento sobre Ilave, así como del acuerdo de construir el Cunga Departamental, involucrarse en el proceso del Congreso Nacional de la CCP; así como impulsar y participar activamente la participación del campesinado puneño en el Paro Nacional del 14 de julio, son otros logros a destacar de este IX Congreso departamental de la organización más representativa del campesinado puneño y de la región surandina.

Todos estos logros se complementan con la elección de una Junta Directiva, que encabeza el compañero Vilcapaza de la combativa base de Azángaro y a la que se ha incorporado un representante aymara de Ilave; dirección que tiene como misión no solo continuar fortaleciendo el movimiento campesino sino llevar a la práctica los acuerdos centrales del Congreso. La participación en el paro nacional del 14 de julio, será sin duda uno de sus principales retos.