Las organizaciones populares, sociales, campesinas y sindicales; estudiantes y frentes regionales, encabezados por la CGTP, ratificaron la convocatoria para el jueves 11 marzo de la Jornada Nacional de Protesta, para exigir al gobierno que cumpla con las demandas de la población y el cambio de la política económica y social del régimen.

Esta movilización se realizará en las principales ciudades del país, con concentraciones y movilizaciones. En el caso de Lima, la concentración previa a la movilización será en la Plaza Dos de Mayo, frente al local de la CGTP.

Una de las principales exigencias de esta movilización popular es exigir al gobierno atender los principales problemas que afectan a mayoría de la población y que tienen que ver con la extrema pobreza, la falta de empleo digno, la defensa de nuestra soberanía; es decir, el cambio de la política económica neoliberal.

El cambio de esta política neoliberal implica por tanto, renegociar el pago de la deuda externa y aplicar una reforma tributaria integral, para que los más ganan y más tienen en nuestro país, sean los que más paguen; y de igual manera, que los tributos no se destinen para pagar la deuda externa o para financiar gastos superfluos, sino para atender las justas demandas de la población. Asimismo, que haya inversión pública para generar fuentes de empleo decente y de esta manera luchar contra la pobreza y la extrema pobreza.

Con la movilización del 11 de marzo, también se está exigiendo al gobierno la restitución de los derechos laborales que fueron arrasados durante la dictadura fujimorista; así como los recursos necesarios para que el proceso de descentralización pueda llevar desarrollo a las regiones del país. En ese sentido, es necesario que el Estado desarrolle una política agraria que beneficie sobre todo a los cientos de miles de pequeños productores y campesinos comuneros, que se encuentran arruinados por no contar con ningún tipo de apoyo para el sector agropecuario.

Una demanda central de esta movilización es la reafirmación de las organizaciones populares, sociales y campesinas de convocar a una Asamblea Constituyente. La crisis que atraviesa el país no se resuelve con cambios de rostros en el gabinete. La crisis del país es una crisis de sistema y régimen político. Y una forma de afrontar esta crisis es ir a una nueva Constitución que reemplace al mamotreto constitucional que fue hecho a la medida de las necesidades del régimen ladrón o cleptocracia que impuso Fujimori y su banda que manejaron el país en la última década.

Por todas estas razones, nuevamente el pueblo saldrá a las calles este jueves 11 de marzo, para decirle al gobierno que se está jugando sus últimas oportunidades para empezar a atender las demandas de la población; o de lo contrario, esta misma gente que lo llevó al gobierno será la encargada de mandarlo de vuelta a su casa.