Derrotarla, implica grandes retos y desafíos, sostiene Joao Pedro Stédile, del MST de Brasil

2004-01-27 00:00:00

El ALCA es una estrategia de sobrevivencia del imperialismo, expresión de la crisis profunda que atraviesa del capitalismo y para derrotarla hay que asumir grandes retos y desafíos, empezando por fortalecer la resistencia popular de las masas. Este planteamiento fue formulado durante la primera conferencia del III Encuentro Hemisférico de Lucha contra el ALCA, que se desarrolla en Cuba y que estuvo a cargo de Joao Pedro Stédile, uno de los dirigentes más destacados del Movimiento Sin Tierra de Brasil (MST).

En esta conferencia, Joao Pedro, además de analizar la naturaleza del ALCA, hizo un balance de la situación en que se encuentra hoy la lucha del movimiento social contra este instrumento de libre comercio, y propuso un conjunto de retos y desafíos para relanzar las nuevas estrategias para enfrentar este peligro para los pueblos de América Latina.

Hay que mencionar que el dirigente del MST, inició su intervención agradeciendo al pueblo y a la revolución cubana por su contribución a generar procesos de unidad de los pueblos del continente y por la ayuda solidaria que brinda a Brasil y otros pueblos de América Latina.

Respecto a la naturaleza del ALCA, explicó que está relacionada con la crisis del capitalismo, pues la economía norteamericana y las empresas transnacionales atraviesan una situación muy difícil. “Son hegemónicas, pero están en crisis y eso los hace más peligrosos”, advirtió. Por ello, mueven sus piezas para encontrar salidas a su proceso de acumulación de capital y requieren de mercados cautivos para sus empresas, remarcó.

Agregó que las transnacionales buscan controlar los servicios y las fuentes de energía así como la agricultura. “Hoy es el petróleo, mañana la bío diversidad y las semillas para imponer un patrón único de alimentación, a través de los alimentos transgénicos. A ello se agrega el control de la industria bélica y para ello buscan mercados, propiciando guerras en distintas partes del mundo”, explicó Joao Pedro.

Para imponer el ALCA, los Estados Unidos necesitan desmontar los estados nacionales de los países pobres, destruir las soberanías nacionales y las culturas de los pueblos, para lo cual libran también una batalla ideológica presentando al libre comercio como la única salida para salir de la pobreza. Ello constituye una falsa idea que el movimiento social debe combatir.

Con relación a la situación de la lucha actual contra el ALCA, Joao Pedro remarcó que América Latina debe prepararse para librar importantes batallas en los próximos años para derrotar al imperialismo, pues Estados Unidos tiene varias estrategias de dominación. Ahora se habla de un “ALCA reducido o ALCA light” y aceptarlos sería un error, pues ello puede reducir el nivel de resistencia popular que ha gestado hasta el momento.

El campo de batalla del movimiento social es la calle, en tanto que el de los gobiernos progresistas son las reuniones oficiales y también deben ayudar a convocar nuevas fuerzas sociales para combatir el ALCA. A los gobiernos obsecuentes hay que dar también una dura lucha para exigirles transparencia y mayor debate en los medios de comunicación pues ello ayuda a la población a informarse y tomar conciencia del peligro que está en juego.

En otra parte de su intervención, el dirigente del MST, analizó el rol que juega el actual gobierno de Brasil frente al ALCA y explicó que no hay un proyecto unitario, lo cual explica las ambigüedades que se dan en este terreno. Agregó que ello también es producto de complejo escenario de la economía brasileña que depende del capital transnacional y del descenso del movimiento de masas que se da desde 1989.

Agregó que el problema no es la naturaleza del gobierno de Lula. “La sociedad brasileña vive una crisis de modelo de proyecto pues el neoliberalismo no resolvió los problemas nacionales. Hay que desarrollar un proyecto popular para recuperar la soberanía y reconstruir la economía en función de nuestros intereses; y la lucha contra el ALCA se enmarca en este contexto”, sostuvo.

En la parte final de su intervención, Joao Pedro formuló un conjunto de propuestas, como parte de los retos y desafíos para dar continuidad a las luchas contra el ALCA, entre los cuales destaca tener una agenda propia de iniciativas políticas, fortalecer las estrategias de información y comunicación con el pueblo para desnudar la naturaleza del ALCA, e involucrar a otros sectores sociales en esta lucha como son los gobiernos locales, los industriales nacionales, las clases medias, universidades, entre otros.

De igual manera, articular nuestra campaña con otras fuerzas fuera de nuestro hemisferio y que luchan contra la guerra, la militarización y el FMI; lograr acciones unitarias de masas en todo el continente, pues ya no bastan los calendarios nacionales; y luchar contra la reelección de Bus “el nuevo Hitler”, con manifestaciones contra las embajadas norteamericanas.

Debatir y construir propuestas alternativas frente al ALCA es otro de los grandes desafíos, así persistir en construcción de proyectos populares en nuestros países, pues “la lucha contra el ALCA es continental, pero las trincheras son nacionales”, afirmó Joao Pedro, quien concluyó su intervención demandando estar atentos y solidarios con los pueblos cubano y venezolano, “pues nuestra obligación es defenderlos a cualquier costo”.