Dalinda Robledo:

2007-10-12 00:00:00

No solo es una destacada dirigenta nacional de la Confederación Campesina del Perú; es también la presidenta de su comunidad campesina, San Vicente El Molino, ubicada en el distrito de Ayabaca; y justamente, desde esa responsabilidad, ella ha jugado un papel muy importante en la organización y realización de la Consulta Vecinal del pasado 16 de setiembre que se rechazó la presencia minera en la zona andina de las provincias de Ayabaca y Huancabamba en el departamento de Piura.

Nos estamos refiriendo a Dalinda Robledo García, secretaria nacional de la juventud campesina, de la CCP, quien puede hablar con toda autoridad de lo que ha significado esta gesta democrática en defensa de sus recursos naturales y de su agricultura, pues estuvo desde que se comenzó a gestar la idea de convocar a la Consulta Vecinal.

Y es con esa autoridad que no duda en rechazar toda la brutal y millonaria campaña que el gobierno aprista y la empresa minera Majaz, desataron para acusar a los organizadores de manipular a los campesinos y pobladores; y además de acusarlos de comunistas o extremistas. “La participación de la población y de las comunidades en la consulta vecina ha sido totalmente conciente, voluntaria y democrática en defensa de sus recursos naturales, y para rechazar a una empresa como la Majaz que desde que llegó a la zona, lo hizo mintiendo a la población”, afirma Dalinda.

Y sobre la acusación de comunistas que les hizo el propio Alan García, también respondió sin titubear. “Si todos los que defendemos los recursos naturales y luchamos contra la minería irresponsable, Alan García ya no estuviera en el gobierno porque hace tiempo lo hubiéramos echado a la calle”, afirma la dirigenta campesina, al tiempo que reconoce el importante apoyo que han tenido de la Iglesia, a la que también atacó Alan García, al llamarlos “curas verdes y rojos”.

Agrega que lo que el gobierno no entiende es que la Consulta Vecinal ha sido el epílogo de un arduo trabajo de información, de bajada de bases, de toma de conciencia. “Es este trabajo lo que ha permitido la presencia masiva de los pobladores y comuneros, a pesar de la represión y de la campaña del gobierno y de la empresa contra la consulta, de las amenazas contra los dirigentes y los alcaldes distritales”.

Sin embargo, la dirigenta también tiene claro que si bien la consulta ha sido exitosa y ha permitido reafirmar la decisión de defender sus recursos naturales y rechazar la minería, la lucha no ha terminado. “Hemos ganado una batalla muy importante; pero se nos vienen nuevas luchas porque el gobierno y la empresa van a seguir insistiendo en la minería”, advirtió Dalinda Robledo García.