Los grandes medios de comunicación y sobre todo la televisión organizaron un plantón el pasado 21 de junio, frente a la embajada venezolana, dizque para protestar por el recorte de la libertad de prensa en Venezuela. Un minúsculo grupo entre los dueños y conductores de televisión, pretendieron así llevar a las calles la campaña contra la revolución bolivariana que día a día lanzan sobre todo por las pantallas.
Pero como ya el pueblo los conoce desde las épocas del corrupto Fujimori y Montesinos, a quienes muchos de ellos se vendieron sin ningún escrúpulo, su famoso plantón fue respondido con una masiva manifestación de apoyo popular que se concentró también frente a la embajada de Venezuela en Lima, y los supuestos defensores de la libertad de expresión tuvieron retirarse.
Y es que ahora ya no es tan fácil mentirle al pueblo, como lo han hecho durante impunemente durante tanto tiempo. Grandes sectores del pueblo peruano ya saben qué intereses defienden los dueños de la televisión en el Perú; ya intuyen que cuando esos señores hablan de libertad de prensa, en realidad lo que defienden es la libertad de empresa, de la que obtienen millonarias ganancias.
Y saben también, que ese poder que la televisión defiende en el Perú, es en esencia el mismo poder que oprime a los pueblos de América Latina, y que no perdonan que pueblos hermanos como Venezuela, Bolivia, Ecuador hayan empezado a labrar su propio futuro, con soberanía y con dignidad. Y por ello, salen a solidarizarse y a defender esos logros, que algún día serán también los de toda Latinoamérica, como lo soñó el libertado Simón Bolívar.