Frente a los ataques del poder mediático
El pasado 28 de mayo el gobierno bolivariano de Venezuela dio un paso trascendental en la decisión de poner la televisión al alcance de las grandes mayorías al crear Televisión Venezolana Social, TVes, en reemplazo de la señal abierta del canal golpista RCTV que había la había usufructuado por más de 50 años. Y por supuesto la reacción del poder de la derecha política, económica y mediática no se ha hecho esperar y han desatado toda una campaña contra la decisión soberana, legítima y legal del gobierno de Hugo Chávez.
La hipocresía del poder nuevamente se ha puesto de manifiesto y se pretende mostrar la no renovación de la concesión a RCTV como si fuera un acto contra la libertad de expresión, cuando en realidad este canal de televisión lo que representa es el poder y la libertad de un poderoso grupo económico que tiene un amplio prontuario por actos justamente contra la libertad de expresión y por apoyar el golpe contra el presidente Hugo Chávez en abril del 2002.
Sin embargo, en medio del griterío de los dueños del poder, apoyados como siempre por los voceros del gobierno del guerrerista Bush, como su secretaria de Estado Condoleezza Rice que defienden al canal golpista venezolano, también han surgido las voces lúcidas de importantes intelectuales del mundo y de diversas organizaciones políticas y sociales que apoyan la decisión soberana del gobierno de Venezuela.
Así, un comunicado de intelectuales, artistas y creadores venezolanos celebra la democratización de los medios y aplaude la entrega de la concesión a una emisora de servicio público. De igual manera, intelectuales argentinos encabezados por el premio Nóbel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, condenaron la campaña contra el gobierno de Venezuela por constituir una “peligrosa escalada de desinformación”. También apoyaron la carta enviada por importantes intelectuales y artistas británicos al presidente Chávez donde afirman que es legítima la decisión del \"gobierno venezolano de no renovar la licencia del canal RCTV, que expiró el 27 de mayo”.
Por su parte el Consejo de la Unión Europea (UE) reconoce en una declaración emitida en Berlín, Alemania, el derecho soberano de Venezuela a no renovar la concesión a RCTV; y comparte «con la República Bolivariana de Venezuela el compromiso con los valores democráticos, como la libertad de prensa y de expresión, elementos esenciales de la democracia». La nota indica que la preocupación de este organismo no es el vencimiento de la concesión, sino que se realice una competencia abierta para el futuro uso de la señal, tal y como lo ha garantizado el propio Gobierno.