Acciones permanentes contra los agrotóxicos del agronegocio transnacional y en defensa de la vida
Este día se conmemora en la mayor parte de los países de nuestro continente y del mundo para visibilizar y denunciar los graves problemas sanitarios, productivos y ambientales que genera el uso de agrotóxicos a nivel global.
En América Latina el uso de agrotóxicos ha intoxicado a millones de personas y ha cobrado miles de víctimas, muchos de ellos niños. Sin embargo, nadie ha asumido la responsabilidad por estos crímenes que permanecen impunes. Existen en nuestra región millones de trabajadores y trabajadoras rurales intoxicados crónicos.
Como CLOC-VC en octubre de 2010, impulsamos a nivel continental la Campaña permanente contra los agrotóxicos y en defensa de la vida" la cual fue asumida también por La Vía Campesina a nivel mundia en su VI Conferencia el pasado mes de Junio.
"Esta campaña está en contra de los agrotóxicos y a favor de la vida, y por lo tanto nuestro objetivo es poner en marcha una amplia lucha contra el actual modelo de agricultura que está basado en el agronegocio, denunciando todos los problemas generados en la salud de las personas y los impactos en el medio ambiente"
"Estamos haciendo una lucha por la transformación de la sociedad, pues la agroecología a la que apuntamos como propuesta alternativa no es compatible con el modelo de sociedad capitalista, nuestras organizaciones de la CLOC/VC, vienen hace años trabajando una implacable lucha contra las transnacionales y por la construcción de la soberanía alimentaria de nuestros pueblos".
El avance de la agricultura capitalista es indiscriminado, las empresas transnacionales: Monsanto, Syngenta, Dow, DuPont, Basf e Bayer, que juntas controlan 67,9% de las ventas, ejercen su dominio en el mercado mundial de los agrotóxicos. Si sumamos las 13 mayores empresas, este control llega a 90%. Estas empresas también controlan la producción de semillas y medicamentos.
Sin embargo, hemos tenido en los últimos tiempos grandes movilizaciones de diferentes países contra las transnacionales del agronegocio, organizaciones sociales que realizaron grandes acciones para incidir en legislaciones en favor de los pueblos; aunque el lobby de las transnacionales en el seno de los espacios de poder político busca no perder el control y seguir generando contaminación del aire, de los suelos, las aguas y los alimentos causando profundos desequilibrios en los ecosistemas, graves impactos en la biodiversidad, deforestación y pérdida de la fertilidad de los suelos, criminalización, expulsión de familias campesinas indígenas de sus territorios,
Las organizaciones campesinas, indígenas, pescadores artesanales, mujeres, sin tierra, urbanas/os cada vez cobramos más conciencia y generamos una articulación permanente para desarrollar la campaña contra los agrotóxicos y en defensa de la vida, mostrando que la forma agroecológica de la producción de alimentos diversos es el camino para frenar a una máquina que contamina, destruye y genera pérdidas irreversibles de nuestro ecosistemas del planeta.
Convocamos a compartir y socializar nuestras acciones, voces, videos, campañas, actividades que se estén desarrollando en las organizaciones locales, nacionales, regionales y mostrar a la sociedad en su conjunto que el sistema de agricultura capitalista, se debilita cuando recuperamos tierra para producir alimentos agroecológicos, cuando generamos consumo responsable.
El Día Internacional de Lucha contra los Agrtóxicos, fue establecida por 400 organizaciones de 60 países que componen la Red de Acción contra Pesticidas (PAN Internacional- Pesticidas Action Network) en memoria de un desastre ocurrido el 3 de diciembre de 1984 en una región llamada Bhopal en la India, donde la empresa Unión Carbide que derramó 27 toneladas de un gas tóxico que intoxico a medio millón de personas de las cuales hasta ahora 25 mil murieron por los problemas causados en la salud. Hasta hoy la Unión Carbide y su propietaria, la Dow, continúan negando la responsabilidad por la intoxicación. Actualmente en Bhopal 100 mil personas tienen enfermedades crónicas por los efectos del desastre y otras 30 mil personas están enfermas por la contaminación.