Indígenas ecuatorianos comparten sus vivencias, sus esperanzas, su realidad.

Testimonios del Buen Vivir

2010-08-20 00:00:00

La Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas, CAOI, está desarrollando talleres nacionales y foros públicos sobre el buen vivir como paradigma de los pueblos indígenas andinos frente a la crisis de civilización. Los ha hecho en Colombia y Ecuador, y el lunes 23 de agosto lo hará en Bolivia. Lo que sigue son extractos del diálogo desarrollado en el Taller Nacional de Ecuador, el jueves 5 de agosto. Los indígenas ecuatorianos, desde sus vivencias cotidianas, su historia, su cosmovisión, sus sentimientos y su realidad, nos dicen qué es el Sumak Kawsay o Buen Vivir.
 
Hablar del buen vivir es todo un planteamiento. En un mundo tan globalizado estamos en una descolonización del pensamiento y hablamos que el indígena está ligado a la naturaleza. Entonces la herencia que nos han dejado nuestros abuelos, sigamos practicándola y sigamos rescatando nuestra sabiduría. Si estamos hablando del buen vivir entonces debemos cuidar la naturaleza.
 
El sol que nos abriga a la tierra y un páramo sagrado en donde se encuentra agua para poder sobrevivir. La luna tierna y las estrellas tienen un significado: sirven para castrar a los animales y no les pasa nada, granos que son fuera de la tierra es bueno sembrar en luna tierna y granos que son debajo de la tierra hay que sembrar en luna llena, no hay que lavar en luna tierna. Tienen una casa de adobe y tienen las medicinas naturales y no utilizan medicina occidental, hortalizas que poseen abono orgánico y nada de químico y productos sanos. Una mujercita montada en burro va a los riítos, a una laguna y están los patitos, los caballitos. Mi abuelito decía que sabía viajar a pie y tenía una buena salud, la comunicación que se tenía era buena y la tradición de organización y de autoeducarnos.
 
El sol de ese color significa el cambio climático que vivimos hoy en día, ya que hay días que nos calienta mucho o días que hace mucho frío y de esta manera están desapareciendo las plantas, el agua, los páramos, los pajaritos, ya que la Madre Tierra está enferma.
 
Cuando tengo empacho tomo cilantro de la costa y me curo porque los medicamentos son solo calmantes que no me curan totalmente, sino que luego vuelve ese dolor. La serpiente sirve para comer y sacar la manteca.
 
En sierra y en la costa siempre necesitamos a un hombre y una mujer que complementan las dos fuerzas para reproducir y lo que queremos es en estado natural. Estas tierras son contaminadas y cada vez ponemos abonos químicos y estamos matando a los pajaritos, a los ratones. Hoy las grandes empresas tienen grandes redes de farmacias de medicina natural. En el mundo occidental se encarcela a los animales y plantas para tener mejores productos dando químico y si no se les pone agua se mueren. Es así como nosotros estamos bajo este techo que no nos permite conectarnos entre la tierra, nosotros y el cielo y todos los seres, no podemos conectarnos y nos intoxicamos nosotros y los animales, el choclo, el haba, el maíz… no podemos conectarnos. Todo esto nos lleva a una deformación integral y lo importante es la visión sobre el respeto a la naturaleza.
 
Muchos sabemos mirar el tiempo con la luna y la luna camina y avanza el ciclo de la vida; el cerro camina de este cerro a este cerro. Para el buen vivir se tiene que estar en buen estado para vivir y no hacernos creer que no hay agua, si el agua se encuentra en nuestro cuerpo.
 
Qué es el Sumak Kawsay: estar bien con nosotros primero y con la naturaleza. Ser estando, estar siendo. Estando bien puedo estar haciendo y puedo hacer cuando la Madre Tierra está bien.
 
Sumak Kawsay es una vida plena, sublime, cuando existe igualdad. Y la igualdad no existe porque el poder está en las pocas manos de los que se creen dueños de la naturaleza, del dinero y del país.
 
Los productos con químicos nos hacen daño, nosotros debemos hacer conciencia sobre esto que nos afecta cada día más, ya que están desapareciendo los ríos, los bosques naturales y debemos tomar medidas radicales y ponerlas en práctica.
 
Me duele la barriga y me voy al doctor; el doctor pregunta: ¿y qué comiste? Yo trabajo en una plantación donde se aplican muchos químicos. ¡Ay, cómo me duele! Bueno le voy dar estas pastillas que le cuestan cien dólares. ¡Tanto! No tengo ese dinero, gracias. Voy donde una mama y me dice: no deberías trabajar con esos productos que te hacen tanto daño, deberías trabajar con productos orgánicos y tienes que hacer un tratamiento con diente de león, etc.
 
Tenemos que hacer valer nuestros derechos y recuperar las tierras que nos arrebataron a la fuerza para poder ser libres y poder ejercer cargos que nos permitan el Buen Vivir.
 
Cuando la Madre Tierra sufre, nosotros también estamos enfermos. No es una vida plena porque la igualdad no existe. Los que tienen el poder no permiten que las comunidades vivan bien con salud, con alegría, con paz, tranquilidad.
 
Un ancianito pregunta: ¿cuántos libros escribió Dios? Dos. No, escribió tres: los libros que dices tú y este libro que es el mejor, este los de los dibujos que nuestros ancestros sabían leer.
 
Buen Vivir es unidad en el hogar y en la comunidad, con armonía, empezando desde los hogares. Formas de organización propia. Retomar el horizonte de nuestros abuelos. Conciencia de la diversidad. Conciencia de todas las dimensiones del cosmos. Plenitud y complementariedad. Sin discriminación. Tener todo lo necesario. Conciencia de la paridad. Es una propuesta civilizatoria de los pueblos originarios.