Entrevista a Itelvina Massioli
Políticas públicas para la soberanía alimentaria
Al término de la Conferencia Mundial sobre Cambio Climático y los derechos de la Madre Tierra celebrada en Cochabamba, Bolivia, el pasado mes de abril, el presidente boliviano Evo Morales se reunió con una amplia delegación de la Vía Campesina y de la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo (CLOC). Entre otros puntos ha quedado el compromiso de impulsar conjuntamente acciones a favor de políticas públicas para la soberanía alimentaria. En las líneas que siguen, recogemos la opinión de Itelvina Massioli, de la Dirección Nacional del Movimiento Sin Tierra del Brasil (MST), tanto sobre la Conferencia como sobre la reunión con el Mandatario boliviano.
- ¿Cuál es el balance respecto al conjunto de la Conferencia sobre Cambio Climático?
El balance general que hicimos la delegación de la Vía Campesina es muy positivo, porque hubo un buen momento que juntó no sólo análisis y reflexión, sino también la acción. Fue un espacio muy importante para articular alianzas y fortalecer la lucha mundial en defensa de la Madre Tierra. A nosotros nos gustó porque el análisis quedó muy claro y creo que fue todo lo contrario a Copenhague, que fue una gran feria de los grandes y de las multinacionales. Mientras que acá fue el gran encuentro de los pueblos, de intercambio, de construcción de alianzas, y de comprender que el principal enemigo de la Madre Tierra y de la vida, es el capitalismo.
Contra éste es preciso avanzar en la construcción de otro proyecto de desarrollo económico, social, político y para eso los pueblos deben fortalecer sus organizaciones y luchar. Esa fue la fortaleza de este gran momento de juntar gentes de todo el mundo: del campo, de la ciudad, de diferentes redes y organizaciones, para hacer frente a la crisis climática que es parte de toda esta crisis del capitalismo, pero más allá, es preciso articular y fortalecer las alianzas de los pueblos.
Quedó muy claro que este modelo de agricultura industrial, basado en los monocultivos, en los transgénicos y en el lucro, no nos sirve. Es uno de los principales responsables de todo este proceso de destrucción de la Madre Tierra y de la naturaleza, porque envenena también a los seres humanos y porque no produce comida. Produce mercancía que es el veneno que está acabando con todo el planeta: no sabemos que es lo que comemos y ahí está la consecuencia de tantas enfermedades como la depresión, que hoy dicen que es dolencia de la modernidad.
Por esto la necesidad de fortalecer la agricultura campesina, la soberanía alimentaria, desarrollar los mercados locales y tener políticas públicas para promover que el hombre y la mujer produzcan alimentos en el campo. Todo esto es fruto de este encuentro que se articula en una enorme alianza en defensa de la Madre Tierra. Entonces todas las políticas de reforma agraria, de soberanía alimentaria, de reforma urbana y de acabar con la concentración de las tierras urbanas, es un conjunto de acciones. Si estamos hablando de defender la Madre Tierra, tenemos que hablar de otro modelo basado en otros principios y valores. No el valor del Capitalismo que se basa en el consumismo y en el individualismo.
- Al término de la Conferencia, Vía Campesina tuvo una reunión con el presidente Evo Morales. ¿Cuáles fueron los temas que trataron?
Fue un encuentro muy bonito y muy relajado. Un encuentro entre compañeros porque Evo Morales como dirigente campesino, también fue fundador de la CLOC y la Vía Campesina. Él estuvo en el proceso desde la Campaña de los 500 años de Resistencia y muchos de los que estábamos ahí ya nos conocíamos desde ese tiempo. Fue un momento de recuerdos, de hacer análisis del momento que estamos viviendo, de hablar de todas las dificultades que hay, donde el Presidente también nos contó de todos los desafíos que tiene en su compromiso con el pueblo boliviano, pero también con todos los campesinos del mundo. Además habló sobre cómo está cumpliendo una misión basada en todo lo que ha aprendido a lo largo de su vida, en la que debe desarrollar un Gobierno para la mayoría y no para la minoría.
Fue un momento importante para reflexionar acerca de cómo la Vía Campesina y el pueblo boliviano pueden contribuir para el éxito de su gobierno, porque todo lo que hemos acumulado en reflexiones en relación a la tierra, a la soberanía, a la agricultura campesina y toda nuestra lucha contra los transgénicos, por desarrollar otro proyecto de agricultura, es un acumulado histórico que el gobierno boliviano puede tomar para hacer en su proceso realidad. Hay un gran compromiso para avanzar en la reforma agraria, en desarrollar políticas públicas de Estado, y en la soberanía alimentaria.
Uno de los puntos importantes fue avanzar para que el Gobierno boliviano sea el que convoque a los demás Gobiernos progresistas y populares de nuestro continente y otros como el Gobierno de Malí y Nepal, para que pudiéramos pensar y desarrollar un proceso internacional de políticas públicas para la soberanía alimentaria. En este sentido, la propuesta es realizar grandes seminarios: el primero sería el próximo año en Bolivia, ahí el gobierno ha nombrado al Ministerio de la Agricultura y de Tierras para avanzar en esta dirección; el segundo sería donde estén los campesinos y los representantes de los gobiernos, porque la reflexión es avanzar en las políticas públicas para la soberanía alimentaria en su totalidad.
- ¿Cuál es el alcance que le dan a esta propuesta?
Cuando se habla de políticas públicas para la soberanía alimentaria, estamos hablando de un principio más amplio como es otro proyecto de agricultura, que tiene que ver con la formación técnica, con otra cultura, con salud, con educación, con un proceso que es preciso pensarlo en su totalidad. Es en esta dirección que nosotros los movimientos de Vía Campesina tenemos mucho que aportar para que los gobiernos comprometidos con gobernar para la mayoría, avancen en las políticas públicas para la soberanía alimentaria y en otro proyecto de agricultura. Como primer paso es importante colocarlos en la ley y en las constituciones, como segundo paso, es que avance desde su materialidad, que llegue a las comunidades.
Ésta fue una parte fuerte de la discusión en el encuentro, pero en la otra, le hicimos una invitación al Presidente, quien se fue muy contento y mostró interés en apoyar todo el proceso del Quinto Congreso de la CLOC, la Tercera Asamblea de Jóvenes y la Cuarta Asamblea de Mujeres. Para nosotros y para él también está claro que cada vez más nuestro continente precisa fortalecer su capacidad de acciones continentales para hacer frente al imperio y a los enemigos comunes de los pueblos. Por eso es más urgente la articulación internacional, y él manifestó su interés por apoyar este proceso, porque eso es nuestra respuesta y la garantía para que nuestros procesos de cambio puedan avanzar, desde la integración de los pueblos, que no es una integración apenas por lo económico, sino fundamentalmente una integración política, cultural, de alianzas, de lucha, de movilización, de formación para promover el enfrentamiento y la perspectiva de otro proyecto popular de sociedad y de agricultura.
- Respecto al próximo Encuentro de Cancún, donde nuevamente se abordará el tema climático, ¿hubo alguna propuesta específica para el seguimiento?
Las reflexiones que hicimos van en el sentido de poder avanzar porque nuestra mirada debe estar más allá de Cancún, eso fue una buena fortaleza de la reflexión. En ese sentido hablamos de que tenemos que construir millares de Cancún y ahí tenemos que colocar nuestras energías; y hacer el referendo mundial de los pueblos sobre las crisis climáticas y la defensa de la Madre Tierra. Creemos que este proceso político pedagógico tiene que ser una herramienta para hacer conciencia y para impulsar movilizaciones de los pueblos en todos los continentes.
Entonces, ir pensando en grandes movilizaciones desde cada uno de nuestros países, obviamente en Cancún también habrá en ese periodo movilización, pero nuestra respuesta va a ser en varias partes del mundo donde los pueblos se movilizan con una sola voz rechazando y denunciando. No nos hace falta estar en Cancún físicamente, lo que nos hace falta es estar donde está la batalla contra los intereses del capital que no tiene ninguna responsabilidad con la vida y con el planeta. Tenemos que responder desde cada uno de nuestros territorios. Éste fue nuestro compromiso y seguiremos haciendo alianzas para que avancemos en esa dirección.
Me parece que este momento está muy fuerte y son temáticas que nos movilizan a todos, pero debemos ser claros políticamente en hacer frente a los intereses que están por detrás, como el interés del capital que tiene como bandera el negocio y el lucro que deja como consecuencia la destrucción de la vida y del plantea, el empobrecimiento, el saqueo de nuestras riquezas naturales y la explotación del ser humano. Es decir, todo en función de las ganancias de las grandes transnacionales. De verdad que frente a eso solo hay un camino: organizar el pueblo y luchar.