Consecuencias de la Conquista y del Calentamiento Global

2010-05-04 00:00:00

Nueva York.- Los Andes del Abya Yala han sufrido el impacto más cruel de la conquista y la colonización, el primer día de encuentro del Inca Atahualpa con las Fuerzas de Francisco Pizarro corrieron ríos de sangre con la muerte de miles y miles de guerreros del Inca en Cajamarca. Este hecho histórico marca el punto de partida del saqueo de los tesoros y metales preciosos de los Andes, a costa del genocidio, alentado por la Iglesia Católica, que implantó su dogma como una verdad absoluta, denominando a los indígenas como animales sin alma.
 
Con estas palabras, Tomás Huanacu Tito, Subcoordinador General de la CAOI, inició ayer su intervención en el Noveno Período de Sesiones del Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas de las Naciones Unidas, que se desarrolla en esta ciudad entre el 19 y 30 de este mes. Presentamos aquí el texto de su intervención:
 
De acuerdo a la historia oral de nuestros abuelos, en el territorio de los Andes existían muchas variedades de especies de arbustos y forrajes nativos que alimentaban a miles de las especies propias, principalmente llamas. Estos forrajes nativos conservaban su capacidad de regeneración de acuerdo a los ciclos de la Madre Tierra, porque no eran arrancados desde la raíz.
 
Desde que los depredadores llegaron a estas tierras, trajeron consigo a otros depredadores como los cerdos, burros, caballos, mulas, vacas, ovejas, cabras y otros, cuyas formas de alimentación eran arrancando desde la raíz y eliminando las cualidades reproductivas.
 
Por otra parte, los invasores, para saquear el oro, la plata y posteriormente el estaño, que les sirvió para implementar su desarrollo, se valieron de los Pueblos y de la llama, para cargar los metales desde el cerro rico de Potosí hasta el puerto de Tacna, de donde eran embarcados dichos metales con dirección del viejo mundo.
 
De esta forma las mulas, caballos y otros deforestaron los bosques nativos. Quenuales, cactus, pajonales, leñares, y la flora de la puna han sido deforestados para fundir los metales, cocinar los alimentos, y para construir las viviendas de los nefastos conquistadores.
 
Esta fue la primera arremetida fatal de la invasión contra los arbustos nativos que nunca más volveremos a ver.
 
Actualmente con el calentamiento global, vastas regiones de los Andes son desertificadas por las industrias extractivas, por el mal uso del agua, por la brutal sequía, por la helada y el violento cambio climatológico.
 
Hace pocos años, miles de llamas han sido enterradas por la granizada en el sur de los Lipez,  y con ellas muchas especies de forrajes y arbustos nativos han desaparecido. El 24 de diciembre del 2009, 88 llamas fueron enterradas con el granizo en un río, en Andamarca de Charangas.
 
Estas catástrofes están obligando a pueblos íntegros a migrar a otros países, como España, Argentina, Brasil. Porque en nuestros territorios solo se ve desolación, hambre y muerte, debido a la brutal sequía o brusca caída de granizos que diezma los cultivos por el calentamiento global.
 
Estos ejemplos ilustrativos del cambio climático, sumados a las actividades de las industrias extractivas, están provocando el deshielo de las montañas nevadas, la desertificación de los suelos, la exterminación de los arbustos nativos, la migración de los Pueblos Indígenas.
 
Por esta razón, formulamos las siguientes recomendaciones:
 
PRIMERO.- Priorizar para el 2011, un medio día de diálogo con los Andes del  Abya Yala, con los siguientes temas: calentamiento global, cambios climáticos, deshielo de sus nevados, sequías, industrias extractivas, contaminación de sus aguas, de los ríos y lagos, desertificación de sus suelos, forrajes, bosques, praderas nativas, vicisitudes de los criadores de camélidos y problemas sociales, económicos y culturales.
 
SEGUNDO.- Demandar a los países conquistadores el resarcimiento histórico por los daños ocasionados con los bosques y forrajes nativos en tiempos de la colonia.
 
TERCERO.-  Demandar a los países desarrollados e industrializados el pago por la deuda ecológica que han provocado con la emisión de gases de efecto invernadero.
 
CUARTO.- Demandar a los países como Nueva Zelanda, Australia, Estado de California, por el saqueo de los camélidos andinos, sin cumplir los procedimientos de la consulta y sin el consentimiento previo, y por la franca apropiación de la propiedad intelectual.
 
QUINTO.- Buscar apoyo financiero del segundo decenio, para paliar necesidades de las familias en desgracia.
 
COORDINADORA ANDINA DE ORGANIZACIONES INDÍGENAS – CAOI
Bolivia, Ecuador, Perú, Colombia, Chile, Argentina