A pocas horas de inaugurarse el cuarto congreso nacional de  CONACAMI, un grupo de efectivos policiales se hicieron presentes en el local ¨Dionys¨ en la entrada de Huachipa (distrito Ate Vitarte), donde 400 representantes de todas las regiones del país se congregan con la finalidad de debatir la agenda de las comunidades afectadas por las actividades mineras y extractivas.
 
Aunque en un primer momento manifestaron que venían a resguardar el evento, momentos después los policías ingresaron al local con una actitud intimidatoria preguntando por detalles que en teoría tenían conocimiento previo.
 
La presencia de la policía evidencia la actitud autoritaria y represiva del gobierno aprista contra los procesos de unidad, democratización  y fortalecimiento de las organizaciones representativas de los pueblos indígenas en el Perú
 
El evento continuará el día viernes con cuatro conferencias donde se abordarán temas como la obligación del Estado de aprobar la Ley de consulta con relación al Convenio 169, las propuestas de los pueblos frente a la crisis climática y la criminalización de las luchas sociales.