Colombia: Águilas Negras amenazan y persiguen a los Embera

2009-08-18 00:00:00

Drama de una comunidad Embera -70 personas- del Chocó; en un año se han desplazado tres veces, han recibido constantes agresiones de las Águilas Negras y, no han recibido apoyo del gobierno, ni siquiera se les reconoce como desplazados.
 
Chocó/ Águilas Negras amenazan y persiguen a los indígenas de Pichinde en el resguardo de Santa Marta de Curiche municipio de Jurado
 
Hechos:
 
El días 06 de agosto de 2009, entre 6:00 y 8:00 de la mañana llegaron siete hombres encapuchados, armados con fusiles, hasta donde estaban las familias indígenas del Pueblo Embera Dovida desplazado de Pichinde del resguardo indígena de Villa Nueva Juná, municipio de Bahía Solano desde 2008. Los encapuchados amarraron a los hombres a mujeres de manos y pies, les ataron y luego los maltrataron a todos con los fusiles; les hacían tiros cercas de los oídos, les daban puntazos de fusil y patadas.
 
Los encapuchados andaban como desesperados y con miedo como pendiente de otro actor armado, luego amenazaron de muerte a los indígenas de la comunidad y les advirtieron que si denunciaban los hechos a los organismos del Estado o de derechos humanos regresarían nuevamente y los masacrarían a todos sin compasión.
 
La acción de maltratos y amenaza de los encapuchados los hicieron identificándose de pertenecer al grupo paramilitar las “Águilas Negras”.
 
Antecedente.
 
Estas familias indígenas de Pichinde resguardo de Villanueva Juná, municipio Bahía Solanos ya habían recibido maltratos y amenazas en agosto de 2008.
 
En esa ocasión, al retirarse los encapuchados, los amenazaron de muerte si no se iban del resguardo indígena Villa Nueva de Juná, el hecho fue dado a conocer a las autoridades municipales civiles y militares de Bahía Solano.
 
Des entonces han recibido amenazas y, por tal razón se desplazaron de su resguardo el día 18 de octubre de 2008, la comunidad de Pichinde se desplazó totalmente.
 
Estas familias indígenas desde esa fecha han solicitado del gobierno municipal y nacional atención y garantía de protección, pero hasta la fecha no han tenido ningún apoyo del gobierno. En bahía Solano estuvieron tres meses desplazados; al no ser atendido a finales de diciembre de 2008 se trasladaron a la cabecera municipal de Juradó donde tampoco han recibido atención del Gobierno.
 
En Juradó sólo recibieron solidaridad de las comunidades indígenas y de algunas familias campesinos y afro descendientes. Llevan ocho meses viviendo en la cabecera municipal de Juradó bajo unos improvisados ranchos de plásticos que le construyó el cabildo Mayor indígena. A la fecha estamos en invierno y no se puede vivir bajo los plásticos porque estos no resisten las fuertes lluvias y vientos que soplan a orillas del mar.
 
Esta situación de invierno y hambres que padecen les obligó el pasado lunes 02 de agosto de 2009 a desplazarse al resguardo indígena de Santa Marta de Curiche, para hacer mejores ranchos para albergarse y a sembrar comidas para mitigar el hambres y las lluvias, lugar que fue escogido por recomendación del cabildo mayor indígena de Juradó.
 
Las amenazas, el hambre y los continuos desplazamientos ponen en alto riesgo la vida de los indígenas que en cualquier momento pueden ser masacrados por estos hombres armados. Mientras tantos el gobierno nacional a través de Acción Social de la Presidencia de la República sigue negando que esta comunidad son desplazados por actores armados sino que se trata de un problema interno entre indígena o grupo de la delincuencia común y se ha negado de registrarlos como desplazados.
 
¿Nos preguntamos por qué el gobierno no quiere atenderlo y se niega a registrarlos como desplazados?
 
Los indígenas de Pichindé del resguardo indígena Villa Nueva Juná. Nuevamente regresaron hoy agosto 08 de 2009, a la cabecera municipal de Juradó, donde siguen sin alberques, comidas, salud, educación así como protección y garantía de seguridad.
 
Por todas las anteriores razones solicitamos que esta vez se haga presente una comisión humanitaria para atender esta emergencia de derechos humanos y humanitarios.
 
Solicitamos que una misión humanitaria integrado por la ACNUR, Naciones Unidas, Defensoría del Pueblo y Procuraduría se hagan presente al resguardo indígena de Santa Marta de Curiche municipio de Jurado donde se encontraban en estos cinco días los desplazados indígenas de Pichindé para que se evalué la situación y se tomen medidas de protección y de atención.
 
Responsabilizamos al gobierno nacional, departamental del Chocó y la alcaldía de Juradó y Bahía Solano por cualquier hecho doloso que le pase a esta comunidad indígena, pues no le han prestado atención humanitaria ni le han brindado garantías de protección ni seguridad.
 
Agosto 8 de 2009-
 
Consejo de Autoridades Indigenas de Asorewa