“…Si muero, muero, pero uno siquiera ha de

quedar para seguir, para continuar”

Mama Dolores Cacuango
La Escuela Política “Dolores Cacuango” de la ECUARUNARI, en este 8 de marzo saludamos la lucha y resistencia que desde el corazón de las mujeres elevamos desde hace siglos para hacer respetar nuestros derechos y de la Pachamama, que han sido vulnerados por la prepotencia machista e imperial.
Esta conmemoración no debe ser una fecha al puro estilo capitalista, en el cual se apuntala con regalos la sociedad consumista. Es un tiempo para acrecentar la hoguera de rebeldía con el fuego femenino, aquel fuego que está encendido en nuestros vientres y corazones que vencen constantemente el frío de la injusticia, de la exclusión, del racismo, del sufrimiento y de la muerte. Es la hora de mantener encendido el fuego que nos permite danzar ante los cánticos de gozo que engendra la vida. Es la hora que la luz lunar, que sostiene nuestras vidas y la de nuestros hijos, venza la penumbra de la noche provocada por el sistema capitalista neoliberal. Es la oportunidad de renovar nuestro grito amoroso que busca ser fecundado mediante nuestras luchas, para parir la sociedad nueva, con mujeres y hombres nuevos.
Como mujeres y madres convocamos a todos los pueblos a levantarse y hacer realidad aquello por lo que nuestros taitas y mamas entregaron sus vidas, es decir la construcción comunitaria del SUMAK KAWSAY, que no debe simplemente quedar escrito en una Constitución, sino expresado en la vida, mediante una auténtica revolución que emerja desde los pueblos, con los pueblos y para los pueblos. Una revolución que sepulte para siempre las estructuras viciadas que el capitalismo ha instaurado en el continente Abya Yala desde hace siglos. Una lucha que no permita jamás la usurpación de las riquezas que pertenecen a todas y todos los ecuatorianos, y que defienda la Vida de nuestra Madre, la Tierra fecunda, generosa, sabia y siempre presta.

¡POR LA PACHAMAMA Y NUESTROS HIJOS CONTINUAREMOS LUCHANDO Y VENCEREMOS!

Quito, 8 de marzo de 2009