Uribe abusa de su autoridad para encubrirse y hacerse victimario de la víctima

2008-02-06 00:00:00

La semana pasada el Presidente Uribe acusó por Calumnia e Injuria ante la Comisión de Acusaciones del Congreso a César Julio Valencia Copete, quién hasta hace unos días fuera el presidente de la Corte Suprema de Justicia, porque, según Uribe, él nunca se refirió al caso de su primo, el senador Mario Uribe durante la conversación telefónica que sostuvo con el alto magistrado en septiembre del año pasado.

Esto contradice lo que el Dr. Valencia informara a los medios en su oportunidad y que ratificara en una entrevista para el Diario El Espectador recientemente.

Según el Presidente de la República, la demanda la instaura como cualquier ciudadano para que se haga justicia. Aseveración que indiscutiblemente falta a la verdad y merece el repudio del pueblo colombiano por varias razones, entre ellas que:

- Quien demanda no es un ciudadano cualquiera, es el Presidente de la República, quien utiliza su fuero al presentar la demanda, sabiendo que es su palabra contra la de quien en ese momento era Presidente de la Corte, es decir, la cabeza de todo el sistema jurídico de Colombia. Se trata entonces, ni más ni menos de el Presidente contra la Justicia, por más que el Presidente pretenda encubrirlo.

- La comisión de acusaciones del Congreso, no es un órgano imparcial de justicia, sino una instancia política partidista bajo el control de los copartidarios del Presidente Uribe y de la personalidad a la que hace referencia el caso: el Senador Mario Uribe. De ninguna manera puede aseverar el Presidente de la República que se trata de un mecanismo en justicia y en derecho, pues no hay ni imparcialidad ni debido proceso sino condena anticipada.

- Sería muy difícil creerle al Presidente que no mencionó a su primo hermano, senador y tutor político de toda su carrera política durante la conversación con César Julio Valencia Copete, quien llevara a cabo la investigación y el proceso en su contra. Hacerlo constituye sobrepasarse y abusar de su cargo. Negar haberlo hecho y acusar al exmagistrado es abusar de su autoridad para encubrirse y hacerse victimario de la víctima.

- La Corte Suprema de Justicia no solamente actúa con autonomía (una de las últimas instancias que aún lo hace) frente al ejecutivo, sino que se ocupa de la para-política. Por ello, ya un Magistrado suplente que conoce bien al Presidente desde sus años en la Gobernación de Antioquia fue sacrificado por este mismo mecanismo (acusaciones presidenciales públicas) después de actuar en el mismo caso del Dr. Mario Uribe. Ahora, acabamos de presenciar la repetición de los hechos, es decir, la salida del Presidente de la Corte, supuestamente porque se le terminó el periodo de un año. Pero además, la corte acaba de tumbar la Ley Forestal por fallas indiscutibles e incuestionables.

Todo lo que estorba al Presidente Uribe termina siendo amenazado y destruido, a nombre de la libertad (del Presidente) y la Justicia (para quienes se benefician de la injusticia). Con razón ahora Uribe debe estar más tranquilo, ya que el nuevo presidente Francisco Ricaurte Gómez hizo un llamado a la conciliación y aseguró "que no son convenientes para el país los roces entre los dos órganos del poder" . Al parecer, está por encima salvaguardar la armonía entre los poderes, que defender la verdad y hacer justicia.

Contrario pasa con las múltiples fichas que tiene en el gobierno, quiénes le ayudan en su política guerrerista, como ejemplo el Dr. Juan José Chaux Mosquera, a quien nombró como Embajador de Colombia en Holanda y que ahora está siendo investigado porque "en noviembre del año pasado el detenido jefe de las autodefensas Éver Veloza García, alias HH, entregó a la Fiscalía una comprometedora declaración en la que aseguraba que Chaux habría participado en una "cumbre paramilitar" en 2003 y que además, como si fuera poco, su elección como gobernador se habría logrado con el apoyo armado del Bloque Calima de las Autodefensas1".

Ante esto, la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca manifiesta total rechazo porque queda claro que es una maniobra autoritaria contra la Justicia que constituye un paso más hacia la dictadura en Colombia. Finalmente nos preguntamos ¿Si esto sucede al más alto nivel, qué pueden esperar comuneros, sindicalistas y víctimas de las políticas de Estado?. Con esta maniobra muere la justicia y se cierran los espacios de diálogo y derecho. Avanza el Presidente y quienes lo apoyan hacia la guerra total o la opresión.

Santander de Quilichao, febrero 4 de 2008.

Asociación de Cabildos Indígenas del norte del Cauca-ACIN
http://www.nasaacin.org/noticias.htm?x=7049