Término de la huelga
A mi querido pueblo Mapuche y a todos quienes han puesto en estas movilizaciones su solidaridad, su generosidad, su compromiso por las reivindicaciones de nuestro pueblo:
1.- Deseo expresar mi gran agradecimiento a ustedes hermanas y hermanos que apoyaron durante toda la huelga. Ustedes al igual que yo hemos puesto el hombro a la represión, vencimos el cerco comunicacional, vencimos el orgullo y la arrogancia de un gobierno y nos llenamos de generosidad para dejar de lado los intereses personales y mezquinos por otros intereses más solidarios que aseguren justicia y libertad para todo el pueblo mapuche y chileno, ambos empobrecidos, explotados por un modelo económico depredador e inhumano.
2.- Deseo decir que hoy sí tenemos un documento que indica la forma y otorgamiento de los beneficios, pero que es más que un documento, ya que tiene como garantía a la iglesia a través de Monseñor Alejandro Goic como ente fiscalizador del cumplimiento de este acuerdo. La iglesia ha dado su palabra para el cumplimiento de lo acordado y creemos en ella:
- CET y salida dominical para Juan Millalen.
- CET y fin de semana para Jaime Marileo.
- CET y fin de semana para Patricia Troncoso y recuperación en Temuco. Beneficios que parten desde el inicio de marzo 2008. Este documento está en custodia de la iglesia.
Dejamos en claro, principalmente a la derecha, que el otorgamiento de estos beneficios es nada más y nada menos que el reconocimiento que tiene todo interno condenado, porque, como es sabido, contamos con los requisitos para ello. No es benevolencia sino un acto de justicia.
3.- Quisiera dejar en claro que las huelgas de hambre que se han llevado a cabo no tienen otro propósito que denunciar la injusticia a la cual nos han sometido, por reclamar el derecho del pueblo a tener tierra y autonomía, a denunciar los juicios que no respetaron un debido proceso, a denunciar las aplicaciones de leyes altamente represivas como la ley antiterrorista y la Ley de Seguridad Interior del Estado usadas por Pinochet para reprimir, que siempre serán lícitas si ellos obedecen a denunciar injusticias.
4.- Que entendemos que el conflicto político-histórico con nuestro pueblo obedece principalmente al reconocimiento de su territorio, autonomía y al ejercicio de estas conquistas. Que los convenios internacionales, los reconocimientos constitucionales o papeles que puedan avalarlo no tienen mayor importancia, sino somos nosotros mismos quienes los ejercitamos, hacemos respetar y perseverar en el tiempo para el futuro de nuestras generaciones.
Es por esto que hoy no creemos en estos "supuestos esfuerzos" que hace el gobierno en esta línea, porque todas las voluntades políticas siempre han estado al servicio de la expansión de las forestales, hidroeléctricas, aeropuertos, celulosas, proyectos mineros, depredación y explotación de la naturaleza, sin pensar si estos ponen en riesgo nuestras pocas tierras y lo que nos queda de nuestros recursos naturales.
Pensamos que estos esfuerzos tienen una finalidad, de limpiar la mala imagen del gobierno en el extranjero y de volver a entrampar el tema mayor, que es territorio y autonomía, mientras se nos niega reprimiendo y hablando de aplicaciones de ley antiterrorista. Por esto creemos que el Estado una vez más miente a conveniencia y lo que escribe con la mano luego lo borra con el codo, que los gestos reales para avanzar en nuestro proceso de reconstrucción política deben estar mediados y orientados a buscar alianzas políticas y estratégicas afines para la reconstrucción de un movimiento sano, fuerte y consecuente con la historia y con los desafíos en lo que vive hoy nuestro pueblo.
Si nos preguntamos qué hemos ganado con estas movilizaciones podríamos decir:
a) Primero, haber instalado el tema en términos nacionales e internacionales acerca de la gravedad de la violencia y militarización de la zona en conflicto donde las comunidades hoy resisten.
b) Creemos que en Chile no existen condiciones para tratar el tema de Ley Antiterrorista y criminalización de las demandas del pueblo Mapuche. Es por esta razón que nos reservamos a la mediación que se haga en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, donde se llegue a un acuerdo mayor abordando la Ley Antiterrorista, juicios justos, debidos procesos y presunción de inocencia y fin a los testigos sin rostro o protegidos.
c) El reconocimiento de los beneficios intrapenitenciarios como a cualquier interno encarcelado.
d) El lograr hacer entender al gobierno que el tema mapuche debe ser abordado con seriedad, sin soluciones de parche o proyectos, sino con los temas de fondo que obedecen a territorio y autonomía, represión y militarización de las comunidades y grupos de apoyo en ciudades.
Y quizás lo que hemos ganado sin llegar a dimensionarlo aún, es el "REENCUENTRO DE TODO NUESTRO PUEBLO MAPUCHE". Hemos logrado encontrarnos los dos lados de la cordillera, los puelches y los Wallmapu, ahora somos una sola propuesta política y es la que ha sido heredada de nuestros antepasados: "TIERRA Y AUTONOMÍA".
También nos hemos ganado nosotros mismos la confianza y el trabajo para triunfar, porque las banderas que hemos usado en esta lucha son justas y generosas. Lo que ha puesto cada uno del más, pequeño al más grande, del más humilde al más letrado, puede significar en un futuro cercano cambios reales en materia del respeto a los Derechos Humanos, cambios del sistema económico depredador e inhumano, protección y resguardo de los recursos naturales "de los pocos que nos quedan", legalidad que permita fiscalizar y elevar las exigencias del impacto ambiental y tecnologías limpias para las futuras inversiones en este país. Frenar el avance de la forestación con bosques exóticos, frenar la depredación al bosque autóctono y flora endémica, a fin de proteger todas aquellas inversiones que pongan en peligro el equilibrio y biodiversidad de nuestros territorios junto al ejercicio de los derechos políticos individuales y colectivos de nuestro pueblo.
¿Cuáles son nuestras principales tareas después de esta huelga?
- Consensuar una línea política que permita abordar de manera responsable, sin protagonismo y pequeñeces el tema de fondo de nuestro pueblo: territorio y autonomía y el derecho a disfrutarlo de forma integral.
- Buscar contener a través del trabajo con las redes de apoyo de Chile y el extranjero la gran represión a la que son expuestos permanentes niños, jóvenes, mujeres y ancianos.
- Volver a denunciar a niveles internacionales la situación de DDHH que afecta a nuestro pueblo.
- Trabajar y documentar el tema de la ley antiterrorista y ley de seguridad interior del Estado como armas eficaces de represión, junto a la criminalización de la causa con juicios injustos, testigos protegidos o sin rostro, debido proceso, etc.
Finalmente, decir que hoy 30 de enero del año 2008, pongo fin a mi huelga de hambre que se prolongó durante 112 días, obedeciendo y creyendo en el rol de la iglesia, a quien pedimos su mediación debido a la defensa de los Derechos Humanos y del pueblo pobre y explotado por un modelo económico que ha condenado a la humanidad a perder lo humano, generoso y por sobre todo su relación con Dios y la naturaleza.
Solo me queda agradecer a monseñor Alejandro Goic, quien ha dado grandes muestras de consecuencia, responsabilidad y por sobre todo comprensión de lo difícil de nuestro tema. Por último, aclarar que el problema político histórico del pueblo mapuche es un problema a seguir solucionando y que no depende de una huelga de hambre, sino más bien, de hombres y mujeres decididos a hacerlo.
AHORA, ¡A TRABAJAR!
Mientras haya coligües, coligües naceran.
Si uno cae, diez se levantarán. ¡Marri chi weu!
Chaltumay pu lamgen Newen tuaìñ – wewaiñ
Patricia Troncoso Robles, presa politica mapuche
Chillan, enero 30 del 2008