Integración de los Pueblos

Llega a la Argentina un visitante nada grato para quienes en el continente seguimos apostando a la construcción de un mundo inclusivo y no beligerante, alejado del capitalismo y profundamente humanista. Con el arribo del Secretario de Estado norteamericano Rex Tillerson, no solo habrá de visibilizarse una vez más la política de sumisión al Imperio del actual gobierno de Mauricio Macri sino que surgirán nuevas maniobras de agresión contra quienes luchan por sociedades más justas y solidarias.

Tillerson no es uno más en el gabinete de Donald Trump, se trata de un halcón que posee numerosos antecedentes que lo vinculan a lo más extremista de la política exterior de su país, aquella que de buenas a primeras busca instalar nuevamente la atmósfera de la guerra fría, apuntando sus cañones a los gobiernos y figuras progresistas y revolucionarias de la región. Sus dichos y actitudes van siempre mucho más allá de lo esperado, como ocurriera a su paso por México, advirtiendo a sus pares del gobierno de Peña Nieto sobre una posible injerencia rusa en las próximas elecciones. Si no fuera un tema de suma gravedad podría pensarse en que se trata de una broma, ya que es precisamente el de Estados Unidos el gobierno que más ha generado prácticas injerencistas, prepotentes y maliciosas en Latinoamérica y el mundo..

La perla de la corona de Tillerson se llama Venezuela, y por lo tanto, profundizar el cerco y bloqueo contra ese país es uno de los puntos fundamentales de su gira. Precisamente eso es lo que tratará de ratificar con su genuflexo ladero de la Casa Rosada, sentando las bases de futuras acciones contra el gobierno de Nicolás Maduro. En ese y otros temas similares, como un futuro tratado bilateral de “libre comercio” entre el Mercosur y la Unión Europea, Macri se ofrece como voluntario en el sostenimiento de políticas capitalistas salvajes que han instalado en Argentina un escenario involucionista.

Dentro del plan de ofensiva imperialista contra el continente, Tillerson apunta también a Cuba, Bolivia, Nicaragua y El Salvador, sin olvidar la campaña sucia para que Lula no llegue a la presidencia en Brasil. Busca extinguir así el “mal ejemplo” que significan gobiernos desligados de la tutela de Washington. Es así que el enviado de Trump no solo busca aliados, sino que lanza advertencias a quienes no comulgan con sus objetivos y los chantajea ofreciendo inversiones a cambio de que se arrodillen y hagan buena letra en el futuro. Si a alguno de sus perros falderos le quedara alguna duda basta con recordar el reciente discurso de Trump en el que amenaza duramente a los países de su entorno que tibiamente se desligaron de su provocación de declarar a Jerusalén capital del sionismo.

Desde el Capítulo Argentino de ALBA Movimientos repudiamos la presencia de Tillerson y también la reiterada actitud servil del gobierno macrista para con un imperio guerrerista que solo trae miseria y muerte a la región. Proclamamos una vez más el respaldo incondicional al pueblo y gobierno revolucionario de Venezuela que se apresta, a pesar de toda la campaña desestabilizadora en su contra, a ratificar nuevamente el líderazgo del presidente Nicolás Maduro. Nos solidarizamos con todos los pueblos que no bajan la cabeza ante la ofensiva derechista que sufre el continente, resistiendo y luchando con todos los medios a su alcance.

Fuera Tillerson de Argentina!

Fuera yanquis de América Latina!

ALBA Movimientos (Capítulo Argentina)