¡CON NUESTRAS MANOS COMIENZA LA EXPORTACIÓN, EXIGIMOS:
SALUD, CONTRATO Y PREVISIÓN!

Compañeras trabajadoras nuevamente nos re-encontrarnos
llenas de energía, con nuestros bolsos repletos de
esperanzas y saberes. Cuatro años han transcurrido desde
la histórica 1º Asamblea Nacional de las trabajadoras
asalariadas de la Agroexportacion.

Del norte, Centro y Sur del país, convocadas por ANAMURI
1600 mujeres llegaron al edificio Diego Portales, todas
trabajadoras de la Agroexportacion, ahí por primera vez nos
juntamos, nos reconocimos desde nuestros oficios;
trabajadoras de la uva, de los nectarines, las manzanas y
los arandanos. En ese lugar, juntamos nuestros sueños,
unimos nuestras esperanzas y construimos nuestra propuesta
al calor del debate, frente a las experiencias e
injusticias que como trabajadoras vivimos. Alzamos
nuestras voces para dar a conocer al Presidente de la
República Ricardo Lagos, nuestras exigencias por: Salud,
Contrato y Previsión. Quien en sus palabras nos expresó
que “la situación laboral que se ha venido instalando en la
agroindustria a partir de la década de los ‘80 exige
revisar y reformular el modelo de seguridad social
existente en Chile, para que verdaderamente acoja las
distintas realidades de las trabajadoras y los
trabajadores”. A pesar de esto, a la fecha, nada de lo
planteado por nosotras ha estado en la agenda política del
gobierno.

Esta histórica Asamblea, acordó consagrar el día 26 de
Agosto como el día Nacional de las Trabajadoras Temporeras
de la Agroexportacion. Y convertirlo en un día de acción y
celebración de las trabajadoras de este sector agrícola.

En el 2003 nuestro encuentro fue en Valparaíso, donde se
ubica el ultimo eslabón de la cadena productiva y de donde
parten los embarques con el fruto de nuestro trabajo y
además se encuentra ubicado el Parlamento, el poder
legislativo responsable de formular las leyes que den
respuestas a nuestras demandas.

Una gran jornada llevamos a cabo las 1.200 trabajadoras
concentradas en el Fortín Prat de Valparaíso, las
representantes regionales y provinciales con mucho orgullo
fueron entregando los resultados del control social
efectuados a los servicios relacionados con nuestro sector
como por ejemplo: las direcciones del trabajo, los
servicio de salud ocupacional, SERNAM, etc.

Con una vigilia cultural celebramos nuestro día, durante
toda la noche recibimos los saludos de gremios y
organizaciones sociales, de amigos y amigas de las
trabajadoras. Cantamos, bailamos, compartimos, pintamos y
nos preparamos para la mañana siguiente, llenas de alegría
y fuerza nos fuimos al encuentro con los trabajadores del
puerto, las sirenas solidarias de los barcos anclados
anunciaron la partida de nuestras marcha por las calles
de Valparaíso, que ese día gris se iluminaron con las
banderas lilas de Anamuri. Con gritos, con nuestras
demandas, con fuerza, irrumpimos Salud, Contrato y
Previsión, exigieron las mujeres de la agroexpotación.

Nuestras demandas no habían cambiado, lo que el Presidente
Lagos nos prometió no tuvo ningún impacto en las
políticas públicas. Lo mismo ocurrió con nuestra acción en
el parlamento. Hasta hoy no tenemos soluciones a nuestras
exigencias, que no son solo del sector agrícola, sino de
todo los trabajadores del país.

En el 2004, nuestros esfuerzos estuvieron dirigidos a
fortalecer la acción en nuestras localidades y regiones,
tendimos un cable de norte a sur, una sola voz, a una misma
hora, irrumpió en conferencias de prensas, comunicados y
mensajes en radios saludando a las trabajadoras en su día,
reiterando nuestra demanda, denunciado la actitud indolente
de los empresarios y la complicidad del gobierno, al
ignorar nuestras denuncias y echar al olvido los
compromisos contraídos con las trabajadoras en la 1º
Asamblea Nacional del 2002.

Varios actos y asambleas se realizaron en plazas y locales,
nuestra demanda y la lucha de las mujeres, por un trabajo
digno, Salud, Contrato y Previsión.

Hoy 26 de Agosto del 2005, por cuarta vez, celebramos el
día Nacional de las Asalariadas Temporeras de la
Agroexportacion. No necesitamos leyes, ni reglamentos para
hacer de esta fecha nuestro día, en el que ponemos en el
centro la acción, la lucha por la dignificación de
nosotras las mujeres trabajadoras. Es un día de
resistencia al modelo económico dominante, a los
empresarios inescrupulosos que acumulan enormes fortunas a
costa de nuestro trabajo, a los nuevos negreros, a los
modernos esclavistas, a sus lacayos, los contratitas. Por
eso en esta jornada haremos una fumigación social dirigida
a sus empresas, a las multinacionales, a su consorcio
organizacional. ANAMURI en esta senda de construcción
organizativa de las mujeres del campo ha sido fundamental
para ir venciendo los miedos a organizarse, a demandar y
denunciar las injusticias, legitimándose como una
organización comprometida en la justa lucha de las mujeres
trabajadoras, en la defensa de sus derechos e intereses,
en impulsar el desarrollo y el fortalecimiento de sus
organizaciones como un medio esencial para que las mujeres
y los sectores marginados del campo y de la ciudad logren
colectivamente un mundo mejor.

“Somos una Organización Nacional de Mujeres Rurales e
Indígenas, somos una herramienta para defender nuestros
derechos y lograr condiciones más dignas de vida y de
trabajo”

¡CELEBREMOS NUESTRO DÍA EN LA ACCIÓN! ANAMURI - 2005