El impacto de las tecnologías nanoscópicas en la alimentación y la agricultura

La invasión invisible del campo

2005-01-12 00:00:00

Contenido
Resumen
Introducción
—el tramado de la tierra
1. 
La nano agricultura: una invasión invisible del agro

Semillas miniaturizadas

Plaguicidas nanométricos: venenos encapsulados

Agricultura de precisión: de polvo
inteligente a campos de cultivo inteligentes

El comercio de lo infinitesimal: bienes de consumo
nanométricos

Nano farmacopea para animales

El futuro de los cultivos: nano biotecnología y
biología sintética
2. 
Alimentos y nutrición nanométricos: Nano tecnología
para la panza

La manufactura molecular de alimentos

Empacado

Etiquetado y supervisión

Comida nanométrica: En el fondo, ¿qué
se cocina?

Por encargo especial
3. 
Recomendaciones
Notas
Anexo
uno: Investigación y desarrollo en nanotecnología: las
corporaciones de alimentos y bebidas más grandes del mundo
Anexo
dos: Patentes de nanotecnología para comestibles y su empacado
Resumen
Asunto:
La nanotecnología, la manipulación de la materia en
la escala de los átomos y las moléculas (un nanómetro
[nm] es la millonésima parte de un milímetro), converge
rápidamente con la biotecnología y las tecnologías
de la información para cambiar radicalmente los sistemas de
alimentación y agricultura.  En los próximos
veinte años, los impactos de la convergencia nano escalar en
el quehacer de los agricultores y la producción de alimentos
excederán los de la mecanización del agro o los de la
Revolución Verde.  Las tecnologías convergentes
podrían revigorizar las golpeadas industrias agro
químicas y agro biotecnológicas, avivando un
debate muy intenso —esta vez en torno a alimentos “atómicamente
modificados”.  Ningún gobierno ha desarrollado un
régimen regulatorio que afronte los aspectos relativos a la
nano escala o los impactos sociales de lo pequeño invisible. 
Ya están disponibles comercialmente unos cuantos productos que
contienen aditivos nano escalares,
invisibles, sin etiquetar y sin regulación alguna.

También existen en el mercado algunos plaguicidas
formulados a nivel nanométrico que ya fueron liberados al
ambiente.
******
al
margen
Ningún
gobierno ha desarrollado un régimen regulatorio que afronte
los aspectos relativos a la nano escala o los impactos sociales de lo
pequeño invisible.
******
Impacto:
Del suelo a la cena, la nanotecnología no sólo
cambiará la forma de operar de cada paso de la cadena
alimentaria, sino quién estará involucrado. 
Está en juego el mercado de alimentos al menudeo cuyo monto
mundial es de 3 billones de dólares, un mercado de
exportaciones agrícolas valuado en 544 mil millones de
dólares, y la forma de vida de unos 2 600 millones de personas
dedicadas a la agricultura, por no hablar del bienestar del resto de
nosotros, que dependemos de los agricultores para el pan nuestro de
cada día.[i]

La nanotecnología tiene profundas implicaciones
para los agricultores (los pescadores y los pastores) y para la
soberanía alimentaria a nivel mundial.  La agricultura
puede resultar ahora un campo de prueba para tecnologías que
podrían adaptarse para servir en la vigilancia, el control
social y la guerra biológica.
Políticas:
El debate en torno a los alimentos genéticamente
modificados no pudo responder a las preocupaciones por la salud y el
ambiente que generan, y evadió flagrantemente la discusión
de los aspectos relativos a la propiedad y el control.  Cómo
saldrá afectada la sociedad y quién se beneficia con
esto son los puntos cruciales.  Dado que la nanotecnología
implica toda la materia, las patentes relativas a lo nanométrico
pueden tener impactos profundos en todo el sistema alimentario y en
todos los sectores de la economía.  La biología
sintética y los materiales nanométricos transformarán
de manera dramática la demanda de insumos agrícolas
requeridos por los procesadores.  Los productos nanométricos
llegaron al mercado —y muchos más están en
camino— en ausencia de regulaciones o debate social alguno. 
La fusión de la nanotecnología con la biotecnología
tiene consecuencias desconocidas para la salud, la biodiversidad y el
ambiente.

Los gobiernos y los formadores de opinión van
ocho o diez años atrás de la necesidad social de
información, debate público y diseño de
políticas.
******
al
margen
Ya
están disponibles comercialmente unos cuantos productos que
contienen aditivos nano escalares, invisibles, sin etiquetar y sin
regulación alguna.  También existen en el mercado
algunos plaguicidas formulados a nivel nanométrico que ya
fueron liberados al ambiente.
******
Recomendaciones:
Al permitir que los productos de la nanotecnología lleguen
al mercado sin que haya habido un debate público y una
supervisión regulatoria, los gobiernos, las agroempresas y las
instituciones científicas ya pusieron en peligro los
beneficios potenciales de las tecnologías nanoscópicas. 

Primero, y sobre todo, la sociedad —incluidos los
agricultores, las organizaciones de la sociedad civil y los
movimientos sociales— deben emprender un amplio debate en torno
a la nanotecnología y sus múltiples implicaciones
económicas, ambientales y de salud.  En aras del
principio precautorio, todos los alimentos, las bebidas
(incluidos los suplementos nutricionales), los forrajes y piensos que
incorporen nano partículas manufacturadas, deberán
retirarse de los anaqueles, y se debe prohibir que se comercialicen
nuevos productos hasta el momento en que existan y operen los
protocolos de laboratorio y los regímenes regulatorios que
tomen en cuenta las características especiales de estos
materiales, y se demuestre que son inofensivos.
******
al
margen
Cualquier
esfuerzo que los gobiernos o la industria emprendan por confinar las
discusiones a reuniones de expertos o por debatir únicamente
en torno a los aspectos de seguridad o salud de las tecnologías
nanoscópicas, será un error.  Deben ponerse a
discusión los más amplios aspectos sociales y éticos
también. 

******

De igual manera, debe prohibirse que se liberen
al ambiente las formulaciones nanométricas de insumos
agrícolas tales como fertilizantes y tratamientos para suelos
hasta que un nuevo marco regulatorio diseñado específicamente
para examinar estos productos determine su seguridad. 

Los gobiernos deben declarar también una
moratoria a la experimentación en laboratorio con materiales
procedentes de la “biología sintética” —y
su liberación al ambiente— hasta que la sociedad pueda
comprometerse a un análisis profundo de sus alcances
ambientales, socio económicos y de salud.  Cualquier
esfuerzo que los gobiernos o la industria emprendan por confinar las
discusiones a reuniones de expertos o por debatir únicamente
en torno a los aspectos de seguridad o salud de las tecnologías
nanoscópicas, será un error.  Deben ponerse a
discusión los más amplios aspectos sociales y éticos
también. 

A nivel intergubernamental, los actuales comités
y comisiones de agricultura, pesquería, forestería y
recursos genéticos de la Organización de Alimentación
y Agricultura (fao, por sus siglas en inglés) deberían
supervisar y debatir las nuevas tecnologías, con propuestas y
retroalimentación de organizaciones de campesinos y pequeños
productores.  El comité de problemas relativos a los
bienes de consumo de fao (Committee on Commodity Problems) debería,
de inmediato, comenzar a examinar las implicaciones socio económicas
que entrañan para los agricultores, la seguridad alimentaria y
los gobiernos nacionales.  El comité de seguridad
alimentaria mundial de fao/Naciones Unidas (Committee on World Food
Security) debería discutir las implicaciones de un posible
agro terrorismo y la soberanía alimentaria. 
Adicionalmente, el Convenio de Diversidad Biológica de
Naciones Unidas debe revisar el impacto potencial de la nano
biotecnología, especialmente en la bio seguridad.  Otras
agencias de Naciones Unidas, como la conferencia de Naciones Unidas
en comercio y desarrollo (United Nations Conference on Trade and
Development, unctad, por sus siglas en inglés) y la
Organización Internacional del Trabajo (oit) deben unirse con
la fao para examinar el impacto de la nanotecnología sobre la
propiedad y el control del abasto mundial de alimentos, los bienes de
consumo y el trabajo.  La comunidad internacional debe
establecer un cuerpo dedicado a rastrear, evaluar y supervisar las
nuevas tecnologías y sus productos mediante una convención
internacional para la evaluación de nuevas tecnologías
(icent, por sus siglas en inglés).

 
Introducción
—el tramado de la tierra
Después
de todo,

no
estamos aconsejándolos

que
coman productos nanotecnológicos
Richard
Smalley

—premio
Nobel

y
empresario de nanotecnología
En una
entrevista concedida el año pasado, el premio Nobel y hoy
empresario de la nanotecnología, Richard Smalley, expresó
su frustración con lo que considera exageradas preocupaciones
en torno a la seguridad implicada en la nanotecnología:
“Después de todo”, dijo Smalley a The New
Stateman, “no estamos aconsejándolos que coman
productos nanotecnológicos”.[ii]

¡Uy!, para el momento en que el doctor Smalley le decía
a los consumidores que no había de qué preocuparse, se
estimaba que el mercado nanotecnológico de comestibles y su
procesado tenía un excedente de 2 mil millones de dólares
y la proyección era que estallaría a más de 20
mil millones para el año 2010.[iii]

Al igual que el doctor Smalley, la mayoría de
nosotros no tiene idea de cuántos productos alimenticios que
contienen aditivos nano escalares están ya en los anaqueles de
las tiendas de abarrotes.  Pero no hay que culpar al doctor
Smalley por no percatarse de los ingredientes nanométricos de
su jugo de frutas —después de todo, son invisibles, los
productos no se etiquetan y nadie impone una supervisión
regulatoria especial.

En enero de 2003, el Grupo etc publicó La
inmensidad de lo mínimo, el primer esfuerzo de la sociedad
civil por describir y analizar la convergencia tecnológica a
nivel nano escalar.  Nuestro informe tuvo un impacto asombroso,
pues catalizó el debate público y la atención de
los medios de comunicación por todo el mundo e instó a
muchos gobiernos y a varias instituciones científicas a
emprender sus propios estudios y a criticar sus propias iniciativas
de investigación.  La invasión invisible del
campo es una primera mirada a las aplicaciones de la
nanotecnología en el ámbito de la alimentación y
la agricultura —con tecnologías que cuentan con el
potencial para revolucionar y consolidar aún más el
control sobre el abasto mundial de alimentos.  Este informe es
el primero en una serie que etc publicará en los próximos
dos años con el fin de indagar los impactos potenciales de la
nanotecnología sobre diferentes sectores económicos y
sociales.

La invasión invisible del campo no es una invectiva
contra el cambio tecnológico ni un llamado a conservar el
sistema imperante.  Más bien es un intento por confrontar
una realidad: operan ya cambios tecnológicos significativos y
afectarán a toda la sociedad.  Algunas de sus
reverberaciones son fáciles de predecir, otras no tanto. 
Al mismo tiempo, este informe no acepta que la “reedificación
extrema” que la nanotecnología hace de la alimentación
y la agricultura sea la conclusión inevitable.  Nuestro
informe atisba el estado del arte y las implicaciones potenciales
para el futuro.  La invasión invisible del campo
se ofrece como punto de partida para un debate, mucho más
amplio, que debe incluir a las organizaciones campesinas y de
agricultores, a