Concluyó en Chiapas seminario internacional sobre la lucha por la tierra

Conflictos agrarios y neoliberalismo devastan al campo

2001-02-07 00:00:00

San Cristóbal de las Casas, Chis., 4 de febrero. Participantes en el
seminario Internacional Sobre la Lucha de la Tierra y la Reforma Agraria, que
reunió a expertos de Africa, Asia y América, concluyeron que en el nuevo
milenio el problema de la tierra ha vuelto a colocarse en el centro del
debate, gracias a "la devastación que el neoliberalismo ha dejado en el
campo, a las luchas agrarias y a las nuevas retóricas del Banco Mundial".

Advirtieron que en Asia, Africa y América Latina la lucha por la tierra es
"candente, y el Banco Mundial trata de desviarla con mecanismos de corte
neoliberal, apertura de mercado y regularización de títulos", entre otras
acciones.

Uno de los ponentes, Peter Rosset, codirector del estadunidense Instituto de
Política de Alimentación y Desarrollo (conocido como Food First), opinó que
la lucha por la tierra en todos los países "continuará hasta que haya
igualdad social en el campo". Sin embargo, sugirió "aprender las lecciones de
las organizaciones más avanzadas en el mundo, que hacen las invasiones con
disciplina y con una visión real de desarrollo, dejando atrás la época de las
invasiones viciadas".

Agregó que las reformas agrarias exitosas se han dado en países como Japón,
Taiwán, República Popular de China, Sur Corea y Cuba, debido a que se
repartieron tierras buenas a los pobres.

En las conclusiones del seminario, el Movimiento de los Sin Tierra de Brasil
"ofrece un ejemplo de invasiones de tierra disciplinadas y responsables,
conducentes a un verdadero desarrollo incluyente".

En el caso de México, se dijo, "se ha experimentado el fracaso de la reforma
agraria, por ser incompleta y tratarse de tierras inferiores".

Los asistentes manifestaron que la política del Banco Mundial de "presionar"
a gobiernos para que hagan una reforma agraria por mecanismos de mercado,
como privatizar la tierra, han contribuido también a poner nuevamente en el
centro del debate el problema agrario.

Araceli Burguete, investigadora del CIESAS, sostuvo que las reformas agrarias
son sólo un punto de partida en la lucha por la tierra. "En Chiapas se puede
decir que los latifundios casi se han extinguido, pero eso no significa que
la gente haya salido de la pobreza, porque otro gran problema es la
dispersión de la población y cada nuevo asentamiento es una nueva demanda de
servicios".

Jorge Arturo Luna, quien participó "a título personal" y no en su papel de
subsecretario de Desarrollo Agrario en Chiapas, expresó que "una verdadera
reforma agraria va más allá de la simple entrega de tierras a los
campesinos".

Señaló que se requiere incorporar la tierra a la producción "de manera
integral, autosostenible y considerando la competencia de un mundo
globalizado, como una forma de llevar la justicia y el desarrollo con calidad
humana al campo".

Afirmó que un reto para los campesinos en este siglo será "considerar que la
lucha por la tierra y por una reforma agraria radical, debe incluir,
comprender y resolver correctamente el planteamiento de los pueblos indios
sobre sus territorios".

La Jornada, México,
lunes 5 de febrero de 2001