Señor
Emil Salim
Director de la Comisión de Revisión de las Industrias Extractivas
del Banco Mundial (RIE)

La Coordinadora Permanente de los Pueblos Indígenas del Perú,
COPPIP, organización indígena de carácter nacional, legalmente
constituida ante las leyes nacionales, y en representación de sus
organizaciones afiliadas, se dirige formalmente a su digna comisión
para solicitar el respeto a las recomendaciones efectuadas en el
sentido de que el Banco Mundial se abstenga de apoyar
finaciariamente las actividades extractivas de carbón, petróleo y
otros hidrocarburos por ser actividades que en nuestra experiencia
vienen causando severos daños a los territorios indígenas, a nuestra
pachamama, a nuestra madre tierra, con quienes los pueblos
originarios guardamos una relación integral y muy especial, que
responde a nuestra cosmovisión indígena.

Los megaproyectos de las industrias extractivas vienen trastornando
la ecología del planeta, produciendo cambios en el ambiente, daños a
los bosques tropicales, a las cuencas hidrográficas, ríos, lagunas,
cochas, afectando la biodioversidad y fundamentalmente afectando
nuestras condiciones de vida como pueblos y comunidades indígenas,
la misma que se desarrolla desde hace milenios en estrecha armonía
con la naturaleza.

Lamentablemente, en países con una democracia incipiente o débil
como el nuestro, la acción pública está fuertemente influenciada por
los intereses de las industrias extractivas transnacionales. Los
estados latinoamericanos carecen de la imparcialidad y fortaleza
para asegurar un marco legal e institucional mínimamente eficiente,
que garantice un adecuado control de los impactos socioambientales,
la remediación de los daños y la aplicación de compensaciones
justas. Este tipo de proyectos extractivistas terminan imponiéndose
y desplazando otras actividades productivas esenciales como la
pesca, la agricultura, etc. con el consentimiento cómplice de
nuestros gobiernos, sin que se respeten de manera efectiva los
derechos de los pueblos indígenas, como el derecho al territorio, a
la consulta y a la participación, a la autonomía y al propio
desarrollo. Luego de haberse culminado este tipo de proyectos los
pueblos y comunidades indígenas resultamos siempre como la parte más
perjudicada, colocándonos en una situación cada vez más vulnerable y
poniendo en riesgo nuestra propia existencia como pueblos.

Desde el punto de vista de los pueblos indígenas los proyectos de
extracción de recursos poco o nada contribuyen a un verdadero
desarrollo sostenible y a mejorar las condiciones y calidad de vida
de las poblaciones que habitamos al entorno de este tipo de
proyectos. Por el contrario, existe una larga y negra historia que
demuestra que este tipo de proyectos acaban alterando drásticamente
nuestras propias formas de vida y cultura, y además debemos cargar
sobre nuestros hombros y el de nuestros hijos, los graves y pesados
pasivos ambientales y sociales que dejan este tipo de proyectos.

Por lo expuesto es que nos dirigimos a su digna Comisión, para que
no se deje sorprender por supuestas organizaciones indígenas y otro
tipo de instituciones que vienen abogando de manera abierta a favor
de las empresas transnacionales, e intentan sorprender a su Comisión
en el sentido de solicitar el acuerdo del Banco Mundial para
continuar financiando este tipo de proyectos.

Invocamos de manera especial a su Comisión resistir cualquier tipo
de presiones promovidas de manera subrepticia por sectores que
obedecen al interés de las empresas trasnacionales y que ahora hacen
lo posible por obtener mejores condiciones financieras, ascociarse
al nombre del Banco Mundial e intentar colocar un sello verde a este
tipo de proyectos, cuyos stándares de eficiencia de sostenibilidad
son muy cuestionables y no han sido confirmados en la práctica.

Creemos, finalmente que el Banco Mundial debe concentrar sus
esfuerzos técnicos y financieros en auténticos proyectos de
desarrollo social, cuyos beneficios y rentabilidad social sea
incuestionables y no acentúen los conflictos sociales y la violación
de los derechos de los sectores más excluidos de la sociedad como
los pueblos y comunidades indígenas.

Cordialmente,

Miguel¨Palacín Quispe
Documento Nacional de Identidad N° 04001119
Presidente de la Coordinadora Pemanente de los Pueblos Indígenas del
Perú
- COPPIP

Haroldo Salazar Rossi
Documento Nacional de Identidad N° 20528678
Vicepresidente de la Asociación Interétnica de Desarrollo de la
Selva
Peruana - AIDESEP