El Salvador: Retos y desafíos del Gobierno del FMLN
Después de 20 años consecutivos de gobierno de derecha en El Salvador, encabezado por el Partido Alianza Republicana Nacionalista –ARENA-, la elección de Mauricio Funes, debería significar un giro total a la política en el país centroamericano donde el FMLN tendrá la responsabilidad en los próximos 5 años de cumplir con los compromisos frente a las principales necesidades de los habitantes del país.
Las dos décadas del gobierno de ARENA con tendencias claras de impulsar políticas a través de un sistema capitalista y neoliberal, y con grandes vínculos con los Estados Unidos, dejó como balance una serie de problemáticas que no fueron solucionadas y que han causado grandes repercusiones en diferentes ámbitos de la vida económica, política y social del país.
Dentro de las diferentes políticas impulsadas, cabe destacar las económicas en las que se encuentra la aprobación del Tratado de Libre Comercio con los Estados Unidos, Centro América y El Caribe, que generó una fuerte oposición en la región centroamericana, ante una amenaza directa contra la soberanía y el despojo contra los pueblos de la región.
Otra política que repercutió en la economía del país y que afectó principalmente a la clase más desposeída como campesinos, indígenas y obreros, fue la dolarización del país, la cual causó sorpresa y fuertes efectos negativos al pueblo salvadoreño, debido a que no se visualizó la magnitud del impacto que traería a la economía del país: mientras los sueldos siguen siendo pagados en colones, los gastos se realizan con la nueva moneda. Es decir, no hay ajustes a lo que implican los gastos en dólares. Esto limitó cubrir los gastos básicos para salud, educación, transporte, vestuario, entre otros.
En lo que respecta a resolver la inseguridad en el país, el gobierno Arenero, impulsó planes de seguridad denominados: “Mano Dura y Súper – Mano Dura”, con el supuesto objetivo de disminuir la violencia en el país. Sin embargo, estas políticas lo que hicieron fue criminalizar las y los jóvenes, y el controlar el “terrorismo” que “amenaza” la región. Pero no se crearon políticas para resolver el problema estructural provocado por un modelo económico y social excluyente.
Antes de que el FMLN heredara la presidencia del gobierno derechista, se registró un dato alarmante de 13 a 14 homicidios diarios incluyendo feminicidio. Estos son apenas algunos datos que reflejan la situación de crisis en la que dejó sumido al país el gobierno derechista de ARENA.
El 15 de marzo de 2009 se celebraron las elecciones presidenciales en el país centroamericano, dando un giro total a la política porque los salvadoreños, principalmente campesinos, obreros, indígenas y el movimiento social, depositó su confianza y esperanza en el partido izquierdista del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional, obteniendo 1,354,000 votos que representan el 51.32%, mientras ARENA consiguió 1,284,588 que representa un 48.68%. Resultado considerable que le dio fin a 20 años del poder de los derechistas areneros.
Las promesas principales del FMLN fueron las de mejorar las condiciones de vida de la población a través de la creación de empleos, la dinamización de la economía salvadoreña y la mayor inclusión de los sectores más desposeídos. Así como también, facilitar los principales servicios públicos como salud, educación, y combatir la inseguridad que impera en el país centroamericano.
A 6 meses de asumir el Presidente Mauricio Funes, se pueden destacar algunas políticas impulsadas. Cabe mencionar entonces, la gratuidad de la salud, apoyos en el transporte, la telefonía y la educación. Actualmente se discute en la asamblea del legislativo una propuesta de reforma fiscal para generar mayor recaudación de ingresos para la inversión de servicios públicos.
Las expectativas y las demandas de las y los salvadoreños siguen siendo esperanzadoras, especialmente en: el mejoramiento de las condiciones de vida; el esclarecimiento y fin de la impunidad en los hechos que se dieron durante el conflicto armado; y la no adaptación de los modelos capitalistas neoliberales que ceden los bienes naturales para proyectos de extracción minera y de construcción de represas en el país centroamericano.
Así, el gobierno del FMLN, tiene una gran responsabilidad ante la confianza y la esperanza que le depositó el pueblo salvadoreño, considerando que el país vivió 12 años de guerra provocada por un sistema excluyente, y además estuvo gobernado 20 años por un partido derechista que impulsó políticas neoliberales y capitalistas generando crisis en la vida económica, política y social del país.
Managua, Nicaragua 08 de diciembre de 2009