La Federación de Maestros de Puerto Rico repudia las medidas anti-obreras que está considerando el Comité Patronal nombrado por el gobernador electo Luís Fortuño, cuyo propósito principal será seguir echando todo el peso de la crisis sobre la clase trabajadora.

Ese mal llamado Comité de Reconstrucción Económica es la nítida representación de los ricos y poderosos que dominan la economía y el gobierno del este país y por tanto, los principales responsables de la profunda crisis social que nos aqueja. La mayoría de ellos tiene jugosos contratos con el gobierno por lo que constituye un brutal conflicto de intereses que estén dándole recomendaciones al mismo gobierno con el que van a hacer negocios y se van a beneficiar directamente. De hecho, resulta bochornoso que una de las medidas que se ha mencionado es que un consorcio de bancos, entre los cuales está el Banco Popular, le haga un préstamo al gobierno para sufragar parte del déficit.

La Federación de Maestros no le reconoce autoridad alguna a ese comité de patronos y banqueros cuyo papel principal es enriquecerse cada día más de la explotación de los trabajadores y el pueblo. No es casualidad que estén considerando medidas dirigidas a despedir trabajadores, aumentar el IVU, reducir la jornada laboral, disminuir la aportación patronal a los planes médicos, eliminar días feriados y reducir el presupuesto del Departamento de Educación, entre otras. El carácter clasista y burgués de esas medidas habla por sí solo; estos “señores” pretenden que los trabajadores y el pueblo paguemos los platos rotos por la crisis que su afán de lucro ha creado.

Es una burda mentira, una falacia patronal, decir que todos los sectores nos tenemos que sacrificar en aras de resolver la crisis fiscal y económica. Los trabajadores y el pueblo no podemos hacer más sacrificios, ya llegamos al límite mientras los banqueros, los industriales y grandes comerciantes siempre se han beneficiado. Por tanto, si quieren que la crisis no degenere en una gran confrontación de clases que afecte a todo el país, la única alternativa económica es que la crisis la paguen los ricos.

Se equivocan los líderes de las uniones chupacuotas que se están reuniendo con el Comité Patronal si piensan que esta situación se va a resolver tomando café con Richard Carrión y sus socios burgueses. Cuando los lobos invitan a su mesa a las ovejas, ya se sabe cual va a ser el menú. Sólo la movilización y la lucha en la calle nos puede garantizar una salida que evite que nos arranquen derechos adquiridos y privaticen los servicios públicos. La lucha de clases no tiene atajos.

Ciertamente hay que reconocer que el gobierno de Aníbal Acevedo Vilá malbarató cientos de millones de dólares y que es necesario reducir múltiples contratos de servicio que menoscaban las finanzas del gobierno. Sin embargo, para manejar el problema presupuestario es imprescindible ampliar la base contributiva exigiendo que las corporaciones foráneas, los bancos y otros grandes empresarios paguen más impuestos. Ya el pueblo trabajador ha realizado demasiados sacrificios, ahora le corresponde a los grandes intereses hacer lo propio de forma tal que se redistribuya un poco la riqueza en nuestro país.

Reiteramos la solicitud de reunión al gobernador electo pues es él quien tiene la responsabilidad de atender los reclamos del pueblo. El camino que ha iniciado con el Comité es equivocado, es el mismo que llevó a Anibal Acevedo Vilá al fracaso.

Rafael Feliciano Hernández
Presidente
Federación de Maestros
www.fmprlucha.org