Por la Soberanía
Haití: Fuera la Ocupación Económica y Militar
Organizaciones, movimientos, redes y espacios de la ASC – CA reunidos en San Salvador, El Salvador los días 12 y 13 de Abril de 2008, en el marco de las acciones de resistencias frente a la III Ronda de Negociación del Acuerdo de Asociación UE – CA, evaluamos la situación y crisis actual que enfrenta el pueblo haitiano, por lo cuál expresamos lo siguiente:
1. Reconocemos y respaldamos la rebeldía que por más de un siglo impulsan las organizaciones campesinas, sindicales, mujeres, jóvenes y sectores sociales en lucha y resistencia que anhelan por su libertad definitiva frente a las políticas imperialistas de dominación.
2. Valoramos como los efectos de los Programas de Ajustes Estructurales (PAE) impuestos por el Banco Mundial (BM) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) en los últimos 20 años, han transformado la economía auto centrada a favor del bienestar social haitiana a una economía importadora, privatizadora de empresas, de consumismo y de dependencia a favor de las empresas transnacionales y del capital colonialista.
3. La liberación del mercado financiero desde 1990, refleja hoy en día, como esta desconectado de las prioridades estratégicas del desarrollo económico nacional, principalmente con la agricultura, se aplicó una reforma fiscal que le concedió una amnistía fiscal de 10 a 15 años a la burguesía tradicional, la inversión al desarrollo se redujo a menos del 2% en áreas estratégicas como agricultura, medio ambiente, salud, educación, etc. y se elevaron los impuestos directos al consumo.
4. La liberalización del mercado, la reducción de los aranceles a cero (0) a las importaciones de los principales productos sensibles de consumo (arroz, maíz, pescados) destruyó el modelo y estructura más dinámica productora del país, cambio los hábitos de consumo y redujo la producción nacional, teniendo como consecuencias la desarticulación y abandono de las actividades agrícolas, el incremento de la migración, el surgimiento del mercado informal, la desaparición de la economía campesina y mando al desempleo mas de 800 mil haitianos y haitianas en los últimos 10 años.
5. Denunciamos la insistencia del gobierno actual de privatizar totalmente las empresas de telecomunicaciones, electricidad, agua, puertos, aeropuertos, cementeras, los bancos y procesadoras de trigo a favor de la burguesía comercial corrupta, como estrategia de desmantelamiento del Estado Haitiano, y convertir a la isla exclusivamente en un destino turístico y explotador de la mano de obra barata mediante fabricas de maquilas.
6. Condenamos la violación a los Derechos Humanos y la violencia que las Naciones Unidas a desatado en la isla caribeña, ya que la intervención y ocupación militarizar para abordar las inconformidades sociales y los disensos políticos solo han profundizado la crisis e inestabilidad del país, por lo que, instamos a abrir procesos judiciales a los 114 soldados de la ONU acusados por violaciones a mujeres, promover la represión en la frontera al margen de los convenios binacionales entre Haití y República Dominicana, la persecución social en barrios populares y la impunidad con que operan.
7. Hacemos el llamado a la comunidad internacional y a la solidaridad de los pueblos a no permitir que se siga jugando con el destino de los 8 millones de haitianos y haitianas que se aferran a vivir con dignidad humana. La pobreza extrema, la desnutrición de los niños, la exclusión social, el desempleo, el analfabetismo, la falta de democracia y los niveles de corrupción no pueden seguir condenando a condiciones infrahumanas a todo un pueblo que anhela desde más de un siglo por su libertad y autodeterminación.
8. Finalmente queremos señalar que la farsa del ¨Plan Nacional Para Reducir la Pobreza¨ que se iniciar a implementar desde el 2008, solo pretende ser un instrumento más para profundizar la miseria, profundizar las desigualdades sociales, la explotación del pueblo y el saqueo de las riquezas del país a como ha sido demostrado en varios países de América Latina y el Caribe
Por lo tanto exigimos:
1. Cancelación inmediata e incondicional de la deuda externa de Haití.
2. Reinvertir los 535 millones de dólares que se gastan por año en la Misión de Paz de la ONU para la rehabilitación del sector agrícola.
3. Retiro inmediato de las tropas de ocupación e intervención militar de la MINUSTAH.
4. Exigimos a los gobiernos de América Latina y el Caribe que integran las fuerzas de ocupación militar en Haití que retiren sus contingentes de tropas, equipos, recursos y medios, y que este gasto financiado por nuestros pueblos se convierta en ayuda de cooperación solidaria para programas sociales.
5. Abrir juicios contra la impunidad de las fuerzas de ocupación en Haití por violaciones de Derechos Humanos.
6. Demandamos se reencauce un proceso democrático que restablezca la legitimidad institucional, la democracia participativa, la justicia transparente y las libertades.
Por una Integración desde los pueblos
Por relaciones comerciales solidarias y equitativa
Un Caribe es posible… sin ocupación militar
ALIANZA SOCIAL CONTINENTAL CENTROAMERICA