Ratificación del Convenio 169
Sin declaración interpretativa ni reservas
Señalando la misión de los pueblos indígenas d e resguardar sus condiciones de existencia, y en el ánimo del resto irrestricto de los derechos humanos que nos asisten en virtud de nuestras leyes ancestrales, y de las leyes occidentales nacionales e internacionales, queremos manifestar la voluntad del pueblo aymara de exigir que la Presidenta de la República ratifique el Convenio 169 de Pueblos Indígenas y Tribales sin ninguna declaración ni reserva que obstaculice la natural, pura y simple aplicación del Convenio.
Informamos que el Convenio 169 de la OIT fue aprobado por el Congreso con la sugerencia al Gobierno que "apruebe la declaración interpretativa que quiera", sin apoyo a ninguna en particular, de acuerdo a lo que ya se había estipulado ya en 1990, en el documento denominado "proyecto de acuerdo" que acompañó al Convenio en su trámite en el Congreso.
Este proyecto de acuerdo fue votado por los Senadores y por los Diputados. En estos momentos, la Presidenta puede presentar la declaración interpretativa que quiera, pues de acuerdo a la Constitución, ella es quien dirige las Relaciones Internacionales exclusivamente.
La presión debe ser feroz en los Ministerios de Relaciones Exteriores, M ideplan, Segpres e Interior. Es por ello que el Consejo Nacional Aymara de Mallkus y T’allas exige al Gobierno ratificar el Convenio sin mutilación, reforma o sugerencia alguna. Exigimos se respete la voz de los pueblos andinos, de los más de 50.000 aymaras de Chile, que dicen no a cualquier declaración interpretativa, no a las reservas, no a la negación de lo que se firma con la mano y se borra con el codo.
Exigimos además a la OIT que no acepte ningún documento anexo al Convenio 169, que tenga la forma o el fondo de declaraciones interpretativas o de reservas. La OIT de Chile ha tenido una clara participación en la redacción y aceptación de la declaración interpretativa. A ellos nuestra protesta y nuestra advertencia, la de pueblos que no olvidan, la de quienes denunciarán cualquier intento de la perversión del mandato de la OIT, que siempre debió ser el de respetar a los pueblos y sus derechos, y no operar a sus espaldas, en las altas esferas, en nuestra contra.
La Pachamama vigila a las autoridades, revisa su corazón y sus acciones. A ellos acudiremos ante cualquier intento por mutilar el texto del Convenio.
“Markasan Parlapaja Jiwasan Ch’amasawa”
(La organización es nuestra fuerza)
Cecilia Flores Carlos
Presidenta
Consejo Nacional Aymara de Mallkus y T'allas
Iquique - Chile