Más de cuarenta personas provenientes de todo el mundo inesperadamente se juntaron al interior de la ceremonia de apertura de la reunión ministerial de la Organización Mundial de Comercio (OMC) en Hong-Kong, que se inició hoy 13 de diciembre, para protestar contra el intento de la OMC de dar un mayor impulso a la liberalización.

"Hemos visto diez años de engaño de la OMC. Estamos protestando porque no podemos continuar viendo cómo la OMC quita las vidas y los sustentos de granjeros, campesinos y trabajadores a través del mundo”, dijo Walden Bello, director ejecutivo de Focus on the Global South.

Miembros de la sociedad civil, incluyendo organizaciones de granjeros, sindicatos y ONGs alzaron banderas blancas sobre sus cabezas y cantaron lemas durante el discurso de apertura de Pascal Lamy, director general de la OMC. A través del auditorio, alzaron afiches que decían, en varios idiomas: "Apoya a tu pueblo", "la OMC mata a los campesinos". Los activistas exigieron que los países en desarrollo miembros de la OMC rechacen el “paquete hueco del desarrollo”.

"No hay nada en la mesa de la OMC que vaya a beneficiar a los países en desarrollo. Estos deben rechazar lo que les están ofertando. En cualquier caso, "ningún acuerdo es mejor que un mal acuerdo".

Este mensaje fue repetido por varias delegaciones de países en desarrollo que llevaron a cabo ruedas de prensa antes de la sesión plenaria. También se oyó en un foro abierto sobre el G20, co-organizado por la Unión de Campesinos Indonesios y Focus on the Global South. El ministro brasileño para la reforma agraria, Miguel Rosseto, y el negociador jefe de la India, Gopal Pillai, coincidieron en que, dada la manera como están moviéndose las negociaciones, sería preferible no llegar a ningún acuerdo en Hong-Kong.

Marcha

Mientras tanto, en el exterior se realizó una marcha, que partió del parque de Victoria con dirección al centro de convenciones donde se realiza el evento de la OMC. Alrededor de 75 granjeros coreanos saltaron al mar e intentaron nadar hasta al centro de convención, antes de ser recogidos por guardacostas. La muchedumbre los animaba. La policía de Hong-Kong reaccionó de manera exagerada y acordonó inmediatamente las calles del área; centenares de policías vistiendo trajes antimotines se acercaron en forma amenazadora hacia las personas que protestaban.

"Esto está enviando una señal errónea a las protestas democráticas en Hong-Kong. La policía debe ser más sensible a las preocupaciones de la gente y permitir que expresen sus opiniones ", dijo Sajida Ally del centro asiático de migrantes, con sede en Hong-Kong.

(Traducción y resumen: Minga Informativa)

Fuente: Focus on the Global South http://www.focusweb.org/