Ecuador: Carta a Wilma Salgado
CARTA ABIERTA
Quito, 8 de marzo de 2006
Señora doctora
Wilma Salgado Tamayo
Ex Gerenta de la AGD
Presente
Muy estimada Wilma:
En este día de singular significado para las mujeres de todo el mundo, queremos hacerle llegar un especial saludo, con reconocimiento por los aportes de su trabajo académico y de análisis económico, así como por la visión y entereza con que llevó adelante la delicada labor al frente de la Agencia de Garantía de Depósitos –AGD-. Así mismo, le expresamos nuestra solidaridad ante los ataques que ha debido afrontar como injusto y perverso resultado de un trabajo orientado a develar y sancionar uno de los mayores episodios de corrupción y saqueo, como fue la apropiación fraudulenta de fondos de depositantes de la banca cerrada.
La coyuntura que atraviesa el país es decisiva para el futuro inmediato y mediato. Se está imponiendo en estos días la suscripción del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, cuyos previsibles impactos serán negativos para el país y para la mayoría de su población. Nos aprestamos a un proceso electoral del que se esperan resultados que nos lleven por nuevos rumbos, que inicien cambios sustantivos sobre todo en el terreno económico, la recuperación y fortalecimiento de la institucionalidad pública, estatal y ciudadana.
Sabemos de su compromiso con esos cambios, que se ha tornado aún más profundo en medio de la experiencia que está atravesando, que supone una confrontación directa con las estructuras de poder y corrupción de quienes han levantado fortunas total o parcialmente ilícitas; que ha implicado el duro camino de sostener verdades ante instancias públicas controladas por intereses espúreos, debilitadas; de buscar justicia en el reino de la injusticia.
Por eso, a más valorar los grandes costos personales que supone una defensa en condiciones tan adversas, lamentamos que esto limite las posibilidades de entregar a plenitud sus conocimientos, experiencia y visión para la búsqueda de alternativas económicas. La situación creada implica así una doble pérdida, pues se afecta y a su persona y familia, y se perjudica al país al neutralizar una de las voces más autorizadas en el análisis económico. Anotamos esto como mujeres concientes del desafío de ‘apropiarnos’ de la economía y de sus decisiones con una ética diferente, y que así ponderamos su labor en la AGD.
Reiteramos nuestra solidaridad, y juntamos las mejores energías para que su lucha lleve a hacer justicia, en lo personal y en lo concerniente a los casos de corrupción bancario-empresarial que contribuyó a sacar a la luz pública.
Cordialmente,
Por REMTE Ecuador,
Magdalena León T.
Ma. Rosa Anchundia