El presidente Óscar Arias ha sido partidario de TLC con Estados Unidos aún antes de que se conocieran las condiciones en las cuales el mismo fuera firmado. Acabo de leer el informe de la comisión académica de la Universidad de Costa Rica acerca de las inconstitucionalidades del tratado que firmaron los negociadores. Soy solo un ciudadano común y corriente deseoso de conocer las últimas consecuencias que nos acarrearía el firmar el TLC. Confío en los estudiosos de la Universidad de Costa Rica que se han dedicado a estudiar a profundidad la letra menuda de las 3 mil y resto de páginas con leyes y obligaciones para el Estado Costarricense comprometidas por los negociadores en beneficio de las grandes corporaciones, y los empresarios locales.

Don Óscar Arias, presidente de la República y premio Nobel de la Paz, él mismo ha repetido cuando puede que es un intelectual y lector profuso de libros, ha dado la sentencia suma: \"si no aprobamos el TLC, nos lleva el diablo\". Asusta con el diablo don Óscar a esta población educada suficientemente. Esto no es ni más sin menos que una burla a la inteligencia de un pueblo educado.

Piensa don Óscar Arias que estamos en quién sabe qué siglo de atraso mental. No solamente con que nos lleve el diablo a los infiernos a sufrir los suplicios eternos nos ha amenazado don Óscar. También ha dicho si nos creemos la \"mamá de Trazan\" , o \"el ombligo de Buda\" para no aprobar el TLC. ¿Se ha visto semejante forma de expresarse en primer lugar de un gobernante, si no también del derrotismo y entrega?

Lo que firmaron los negociadores es objeto de estudio profundo de parte profesionales de la Universidad de Costa Rica en todas las áreas que comprende el TLC, y concluyen que el TLC es inconstitucional. Esto significa que antes siquiera de someter el TLC a un referéndum debe ser sometido a un proceso de análisis de viabilidad constitucional en la Sala Constitucional. Asustar con el diablo. Este es el resumen del TLC que nos hace nuestro gobernante. Así resume un tratado comercial, que no es un simple tratado comercial sino la entrega de nuestro país, nuestras instituciones emblemáticas, el sistema solidario en el que hemos vivido y progresado, nuestro sistema democrático. Como podemos ver, totalmente carente de intelectualidad, antes bien apelando a los ciudadanos con menos formación, a los ancianos y a los chiquitos menores de edad. Es clara la intención.

Don Óscar Arias parece que no ha superado la etapa en que se asustaba con el diablo por cualquier cosa. Si no te portas bien, te va a llevar el diablo, ¿se acuerdan? Por otro lado don Óscar reafirma la existencia del diablo. Yo dudo de cuál de las dos opciones es la mejor, que nos lleve el diablo o que se apruebe el TLC. El TLC es inconstitucional, según las conclusiones de los estudiosos de la Universidad de Costa Rica. De forma que no debemos preocuparnos porque nos lleve el diablo.