En cualquier supermercado de los Estados Unidos o de algùn paìs europeo, los fumadores mas exigentes consumen puros de alta calidad.
Los hay de diferentes marcas y sobre sus lujosos empaques se lee en la inscripciòn: Made in Nicaragua, o sea, elaborado con tabaco cultivado en este pais.

Pero un fumador de esas latitudes no sabe que este suntuoso producto esta elaborado, en su mayor parte por manos pequeñitas, llenas de lodo y con tiernos rostros empapados de sudor y tristeza, es decir, por niños, niñas y adolescentes contratados por las empresas productoras de la hoja verde.
No se tiene una cantidad aproximada de los menores de edad que trabajan en los plantìos del fertil valle de Jalapa, pero son centenares.

Algunas empresas consultadas en este valle niegan la contrataciòn de menores para las labores de siembra, corte de la hoja, acarreo y fumigaciòn, trabajo preferido para los niños por su habilidad de moverse entre los plantios sin dañar la integridad de la hoja.
Pero algunos adultos entrevistados dijeron que la contratacion siempre existe.
"Los niños son avisados cuando hay visitas de extraños para que se escondan" revelò una de ellas.

Acuerdan la no contratacion de menores.

Santiago Aguirre Zamora Administrador de Agricola Ganadera Norteña Sociedad Anonima, conocida como popularmente AGANORSA y una de las mas grandes en el rubro, dijo que ha sido una realidad la contrataciòn de menores desde los años setenta del siglo pasado. En el ciclo mas puntero de su producciòn contrata hasta 2,000 personas.
"Porque los niños son mas dòciles, y el adulto se cansa mas presentando dolores en la espalda y el niño no; porque su estatura y destreza para cortar no daña las hojas", comentò.

Esta empresa es una de las primeras en firmar un convenio con la Comisiòn Mixta Local encargada de monitorear la situaciòn de la niñez trabajadora en la agricultura. "Ya es una politica de la empresa la no contrataciòn de menores de 18 años, porque no queremos enfrentar problemas con las leyes" dijo Aguirre Zamora.

Desde hace años, varios organismos locales han abordado el tema desde un enfoque denunciativo contra los productores tabacaleros, pero la Asociaciòn de Trabajadores del Campo ATC, con auspicio del Programa Internacional de Erradicaciòn del Trabajo Infantil, IPEC-OIT, logrò una estrategia màs efectiva.

"Comenzamos un proceso de sensibilizaciòn hasta lograr convencer, tanto a los empresarios de la hoja como a los padres y madres de los niños, niñas y adolescentes que trabajan. Habia mucho rechazo a nuestras propuestas, pero insistiendo e insistiendo se logro sacar a 314 menores, que ahora estàn en la escuela".

Reportan incremento de la matricula.

La cantidad de niños rescatados de las tabacaleras es el logro de un proceso piloto de 18 meses que ejecutò ATC con charlas, talleres y capacitaciones sobre los derechos de la niñez, salud, educaciòn, valores, autoestima, cultura y consejerìa familiar.

Una Comisiòn Mixta integrada por el Ministerio del Trabajo (MITRAB), Ministerio de Salud (MINSA), Ministerio de Educaciòn, cultura y deporte (MECD), Alcaldìa, Cruz Roja, Policia Nacional y ATC, acompañò el proceso durante el trayecto del proyecto piloto.

Marcelino Castellon, padre de ocho hijos, es uno de los jefes de familia convencidos de la importancia de mandar en el proceso impulsado por ATC. "Ahora damos gracias a Dios porque los niños aprenden a leer y a escribir y eso les va a servir cuando sean adultos", reflexionò.

Marisol Valenzuela Ruiz, maestra de primaria de la Escuela Barcelona, de la comarca El Limon, recien construida, no da abasto por la demanda de la matricula. Para ella el programa de ATC ha cambiado la vision de los menores, del padre de familia y de las educadoras, "porque se inicia a formar niños de una manera muy distinta, donde se inicia la manera de ver como se pueden rescatar niños que han estado trabajando en el tabaco".