Departamento de Arauca Colombia, Abril 3 del 2004

Las contradicciones sociales y políticas que se han reflejado durante décadas en esta región de nuestro país, hizo que los hombres y mujeres de Arauca asumieran con arrojo la decisión de trazar caminos de vida y dignidad y sin quererlo nos fuimos comprometiendo con Colombia para hacer de este pedazo de nuestra patria un lugar digno de ejemplo de vida, convivencia y permanencia.

Soñamos y nos imaginamos el futuro de nuestros hijos y así mismo decidimos que cada uno de nuestros actos excediera en una práctica consecuente con ese sueño trazado. Por ello hemos sido motivo de agresión y discordia, ya que cada una de las tareas que nos propusimos por una vida digna se fueron convirtiendo en obstáculo ante los proyectos y programas que el Estado tenía trazado para esta tierra, es así como desde las década de los setenta nuestro territorio ha sido escenario de guerra y violación permanente a los Derechos Humanos.

Han sido más de cuatro décadas de lucha y organización por defender nuestro territorio de aquellos intentos por manchar las páginas de la historia de nuestra región con la sangre de nuestros campesinos masacrados bajo la mascara del paramilitarismo, y que en el mandato de los presidentes Andrés Pastrana Arango y de Álvaro Uribe Vélez, se convirtieron estos propósitos, en obsesiones perversas de Estado.

Hoy, como si el manto de la muerte fuera superior al sueño por la vida, en otro episodio cruel se posa en nuestra región con el deseo de entristecer la vida y ferozmente cubrir con su odio demencial, encegueciendo aquellos que se han atribuido el derecho de luchar contra las injusticias sociales, hoy son llevados a un enfrentamiento sin principios, criterio, ni carácter en contra vía de las luchas, intereses y aspiraciones de un pueblo. Se declaran una guerra con cual pierden autoridad moral ante un pueblo testigo histórico de su desarrollo… y talvez por ello acusarnos de culpables. Ciegos por su arrogancia, niegan la razón y la política y dejan al azar su propia identidad, su propia historia, con cada acto de agresión contra un tejido social construido al calor de las luchas reivindicativas y políticas, además consecuente con los sueños de libertad y justicia social.

Mientras tanto y al asecho, los que históricamente han sido responsables de la mayoría de crímenes de lesa humanidad en nuestro territorio, pacientemente planean y ejecutan nuevas agresiones. Reinician su tarea y nuevamente aprovechando el miedo y desconcierto ocasionado por las contradicciones de las guerrillas, empiezan sus incontables planes operativos de acabar de envenenar nuestro departamento y continuar la guerra sucia paramilitar descaradamente ejecutada por el mismo ejercito, pues en Arauca según el circo montado en Diciembre, los paramilitares ya se desmovilizaron. Pero para nosotros la impunidad en el gobierno de Uribe es el mayor ingrediente de sus políticas de seguridad democrática. O sea en este momento estamos en medio de la intolerancia y la barbarie de una guerra sin sentido y de las decisiones repugnantes de las armas.
Es este el panorama que presentamos ante la comunidad nacional e internacional, del presente de nuestro departamento y nuevamente pedirles su acompañamiento y mediación para salvaguardar la vida y el futuro de nuestra región, para estar atentos ante nuevas agresiones a la población civil y nuestro tejido social

POR EL DERECHO A LA VIDA, LA PERMANENCIA EN LE TERRITORIO.
ORGANIZACIONES SOCIALES DEL DEPARTAMENTO DE ARAUCA.