Río Piedras- El Comité Pro Niñez Dominico-Haitiana, el Proyecto Caribeño de Justicia y Paz y el Grito de los Excluidos-Sección de Puerto Rico, condenan la política migratoria del presidente de la República Dominicana Leonel Fernández hacia los haitianos y su empeño en negar el derecho a la nacionalidad a los descendientes de haitianos nacidos en República Dominicana.

Ante la grave crisis en la frontera dominico-haitiana, que se agrava con la muerte por asfixia en un camión de 25 haitianos que eran transportados a República Dominicana la semana pasada, el Presidente dominicano insiste en comparar la situación con la de los Balcanes, actitud que fomenta el racismo y la xenofobia, lo que puede incitar a crímenes de odio, contrario a los valores de la cultura de paz.

En repetidas ocasiones el Presidente Fernández, reacciona molesto cuando se le recuerda que los hijos de inmigrantes dominicanos que nacen en territorio estadounidense tienen pleno derecho a ciudadanía, educación y salud. Nos preocupa la actitud negativa y aislacionista del gobierno dominicano ante la decisión de la Corte Interamericana de Derechos Humanos del pasado 8 de septiembre, que establece claramente que los hijos de inmigrantes haitianos nacidos en la República Dominicana tienen los mismos derechos que toda persona nacida en ese país.

La política migratoria de Leonel Fernández ignora que los derechos humanos no terminan en las fronteras, y el derecho al nombre y a la nacionalidad es un derecho universal. De igual forma, no es ético, ni razonable exigir derechos para la comunidad migrante dominicana y negarlos a los inmigrantes haitianos en la República Dominicana. Todos somos caribeños y antillanos, debemos luchar por la hermandad, no por la exclusión.

16 de enero de 2006