Caminemos todas y todos
Hacia un nuevo cielo y una nueva tierra
Ante la programada “IV Cumbre -de los presidentes- de las Américas” y la “IIIª Cumbre de los Pueblos de América” a realizarse ambas en Mar del Plata –en noviembre de 2005-, el MOVIMIENTO ECUMÉNICO POR LOS DERECHOS HUMANOS, la CONFERENCIA ARGENTINA DE RELIGIOSAS Y RELIGIOSOS y JUSTICIA, PAZ E INTEGRIDAD DE LA CREACIÓN hacen saber a la opinión pública en general y a las comunidades religiosas establecidas en nuestra patria en particular, lo siguiente:
Como iglesias cristianas ecuménicas - tanto en el pasado como hoy - caminamos unidas y comprometidas en la proclamación y defensa de la dignidad sagrada de nuestro pueblo y Continente y su derecho inalienable a una vida con igualdad y justicia verdaderas; soberanía y autodeterminación reales; identidad y libertad inviolables. En tiempos en que el sueño de Dios de que “todos tengan vida y vida en abundancia” está tan amenazado por las consecuencias del neocapitalismo globalizado y genocida y la crisis de sentido, sostenemos la misma y única esperanza del Pueblo, desde el horizonte y la promesa de un Mundo Nuevo Posible, un mundo sin excluidos, con corazón y futuro.
Repudiamos y rechazamos la criminal política neoliberal con sus permanentes y renovados intentos de avanzar con el –pretendido- “libre comercio” (en la OMC, los TLCs plurilaterales y los esfuerzos por proseguir con el ALCA); con sus presiones para el pago de la ilegítima, fraudulenta e inmoral deuda externa; con sus políticas de saqueo y apropiación de nuestros bienes naturales y humanos y con su militarización social –único método que conoce para contener y reprimir las legítimas resistencias de nuestros pueblos a las privatizaciones y al incremento de la inequidad y pobreza en el seno de nuestras sociedades-.
Repudiamos y rechazamos la creciente prepotencia militar de Estados Unidos con su proyecto imperialista de conquista y control de nuestra región (control de las relaciones financieras, culturales, tecnológicas, científicas y aún religiosas) y la presencia en nuestro país de su presidente –jefe supremo de sus ejércitos imperiales-, exponente máximo de este proyecto genocida de neocolonialismo, dominación y exterminio, que invoca a diario sus diabólicos ídolos de muerte y destrucción. Indigna a nuestra conciencia cristiana el enorme esfuerzo y dinero que se está derrochando tratando de salvaguardar la seguridad del genocida Bush, cuando su sola presencia y sus actos son ya como tales un enorme peligro, amenaza permanente y sinónimos de expoliación y destrucción para nuestros pueblos.
Exigimos a quienes nos gobiernan que no sigan negociando con él a espaldas de nuestros pueblos. Tenemos memoria y experiencia suficiente de los efectos diarios de las políticas económicas de –supuesto- “libre mercado” en nuestros países: pueblos desplazados, destrucción de la cultura y economías locales, creciente número de los sin techo, deterioro de la salud y la educación, desempleo, explotación de mujeres y niños, el exterminio planificado de nuestros jóvenes implementado mediante la proliferación e instrumentación sistemática de drogas letales como el “Paco” etc. Nunca antes se había producido tanta riqueza, nunca antes había estado tan mal repartida.
Renovamos nuestra opción por la misericordia y la solidaridad, por la justicia y la paz, desde el compromiso que nos une a nuestro pueblo y la promesa del Reino del Dios de la Vida, que nos sostiene y alienta.
Convocamos a los líderes de todos los credos y a todos los que proclamamos en común el valor inalienable y sagrado de cada vida humana a participar de la Cumbre de los Pueblos, frente a la Cumbre de los presidentes, con la que el gobierno de EEUU y sus aliados pretenden ampliar y fortalecer su proyecto imperialista.
Unamos nuestras voces y nuestras luchas para profundizar el debate, articular la resistencia de nuestros pueblos al avance de este sistema de muerte y fortalecer la construcción de alternativas de vida verdadera partiendo de las múltiples experiencias que ya están surgiendo en medio de nuestros pueblos.
“Creemos que otra integración soberana de los Pueblos es tan necesaria como posible, en defensa de la vida y la paz, porque somos acreedores y no deudores, porque exigimos una efectiva redistribución de la riqueza.”
No habrá paz mientras los derechos de todos los pueblos –y particularmente de los más vulnerables- no sean respetados.
¡Otra América es Posible y la estamos construyendo!.
Ciudad de Buenos Aires, 16 de septiembre de 2005.
–Día de la Memoria por la Noche de los Lápices-
CONFERENCIA ARG. DE RELIGIOSAS/OS
MOV. ECUMÉNICO POR LOS DER. HUMANOS
JUSTICIA Y PAZ E INTEGRIDAD DE LA CREACIÓN
Esta es una convocatoria abierta a la participación y adhesión de todas las comunidades religiosas ecuménicas que lo deseen.
Para adherir :
confar@confar.org.ar
educacion@medh.org.ar