Nosotros (as): campesinos (as), indígenas, trabajadores (as), jóvenes, defensores (as) de derechos humanos, asociaciones de consumidores, trabajadores por cuenta propia, ecologistas, hombres y mujeres centroamericanos (as) y caribeños (as), de diversas organizaciones y movimientos sociales preocupados por el esfuerzo que vienen realizando las élites neoliberales y oligarcas de nuestros países, junto con el gobierno de los Estados Unidos y los organismos financieros internacionales como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Centroamericano de la Integración Económica (BCIE), para favorecer la aprobación del Tratado de Libre Comercio conocido como TLC DR/CA-EEUU (CAFTA), consideramos:

Que el actual tratado con los Estados Unidos constituye una continuidad de las políticas neoliberales, que basadas en el Consenso de Washington han contribuido a la privatización de las instituciones públicas, al desmantelamiento y destrucción del agro y del aparato productivo nacional, así como de las principales garantías y derechos sociales resguardados en los Estados de la región. Por lo tanto, lo que este tratado pretende es darle carácter constitucional a un modelo social y económico excluyente y generador de miseria, como lo ha demostrado su aplicación en países como México y Argentina.

Que los resultados de este modelo saltan a la vista en toda nuestra región: empobrecimiento, concentración de la riqueza en pocas manos, depredación de nuestros recursos naturales, falta de empleo que obliga a las migraciones, abandono del estado de sus responsabilidades en salud, educación y seguridad social.

Que el desarrollo y bienestar de los pueblos centroamericanos y del caribe es posible, pero que para avanzar en este camino de justicia y dignidad es necesario rechazar rotundamente el TLC y las políticas basadas en el libre comercio y apostar por la construcción de un modelo de integración que privilegie la producción y soberanía alimentaría, las respuestas a los dramas sociales que padecemos, empleo digno y protección de nuestros recursos naturales.

Que los Tratados de mal llamado Libre Comercio pueden ser derrotados. Prueba de ello es el descarrilamiento del ALCA y son las acciones de movilización, educación popular y resistencia que en general tienen al TLC en una situación crítica. La más amplia articulación de los sectores sociales y de movimientos contra este tratado, para definir las acciones concretas es lo que nos garantizará la victoria definitiva.

Que en su situación desesperada, frente al mayoritario rechazo del TLC por parte de los sectores populares, los gobiernos y ejércitos de la región han optado por la represión, llegando incluso a matar dirigentes y luchadores sociales como en las peores épocas de la guerra. Frente a esta situación se hace necesaria la más amplia unidad de lucha del pueblo centroamericano y de República Dominicana para evitar estas prácticas que pretenden generar temor y desmovilización. Por ello, convocamos ha apoyar las acciones de resistencia que continúan en Guatemala, Honduras y El Salvador.
Que cualquier mecanismo que obliga a nuestros países a la privatización del agua, de las telecomunicaciones y de la energía, de la educación, de la salud y otros que son derechos ganados de los pueblos, así como toda la agenda complementaria de leyes que existen en nuestras Asambleas y Congresos para lograr la aplicación brutal del TLC, no significan otra cosa que la imposición del modelo neoliberal. Estas leyes, a lo igual, que los préstamos millonarios que reciben los programas de reconversión productiva y de supuesto apoyo a los sectores desfavorecidos del Libre Comercio, por parte del BID y del BCIE, solamente sirven para empobrecer y destruir nuestra posibilidad de ser pueblos autónomos y soberanos, favoreciendo el saqueo de nuestros recursos productivos, energéticos y naturales.

Teniendo en consideración lo anterior, el Primer Encuentro Trinacional contra el TLC, reunido en Managua, Nicaragua, el día 11 de junio del 2005 Acordó:

Hacer un llamado a detener la imposición del modelo neoliberal y a fortalecer las múltiples expresiones de lucha contra el mal llamado libre comercio.
Desarrollar acciones de carácter unitario que propicien la movilización popular contra el TLC y garanticen su derrota definitiva.
Llamar a los parlamentos de nuestros países a no ratificar el TLC, bajo ninguna circunstancia, ni aún bajo las falsas promesas de que se dictaran leyes que amortigüen el impacto del mismo.

Exigir que se detenga cualquier intento de privatización en marcha y en aquellos países donde se han llevado a cabo, iniciar los procesos inmediatos de renegociación, como por ejemplo: las industrias eléctricas y de telecomunicaciones.
Hacer un llamado a todos los sectores de nuestras naciones: intelectuales, profesionales, religiosos, productores, estudiantes, trabajadores (as) por cuenta propia, a que se sumen a este esfuerzo por derrotar el TLC y por la construcción de una alternativa genuinamente progresista para nuestros pueblos.

Fortalecer el proceso de carácter regional que prepara la realización del VI Foro Mesoamericano: “Por la Integración de los Pueblos y contra el Libre Comercio”, del 12 al 14 de diciembre en Costa Rica.

Este Encuentro Trinacional considera que el carácter de esta lucha debe ser antiimperialista, contra la ingerencia del gobierno de los EEUU por medio de la “Carta Democrática” de la OEA y contra las nuevas formas de explotación de los países y sus recursos, por la defensa de la soberanía, así como por la integración de los pueblos de toda América Latina.

Hacia la Resistencia Popular Generalizada
NO al TLC

Primer encuentro Trinacional contra el TLC

¡Otra Centroamérica es posible!
¡Otra República Dominicana es posible!