El Grito de los Excluidos cuando se cumplen 507 años de Resistencia Indígena, Negra, Campesina y Popular Latinoamericana.

En el marco de la recordación del inicio del colonialismo en este continente, el pueblo de Sucumbíos realizará varios actos como
medida de rechazo a las medidas y a la actual situación que vive la sociedad popular de América Latina.

El Grito de los Excluidos, caminatas, foros, manifestaciones artísticas, políticas y religiosas se realizarán durante los días 12 y 13
de octubre.

En estas actividades participan organizaciones populares urbanas y rurales; instituciones públicas y privadas, la iglesia de
Sucumbíos, organizaciones de Derechos Humanos y organizaciones No Gubernamentales.

El Grito de los Excluidos en Sucumbíos Ecuador, se justifica, como se justifica esta manifestación en todos los países y sectores
que vivimos en medio de la pobreza, la injusticia y la explotación. Y digo que se justifica por muchas razones:

UNO, Somos de esta parte del mundo subdesarrollado y manipulado por las potencias industriales. Excluidos de los beneficios
que generan nuestros recursos y nuestro trabajo.

DOS, Somos parte de una región ignorada en el contexto nacional ecuatoriano. Somos excluidos de los planes de desarrollo de
las entidades públicas. Para mucha gente la amazonia solamente significa petróleo, selva y "salvajes".

TRES, nuestro pueblos es pobre: negros, mestizos e indígenas llegados de otras regiones de Ecuador, es decir somos migrantes,
somos excluidos. Negros como somos, nos discriminan y nos marginan de los derechos políticos, civiles, sociales, económicos,
culturales. Indígenas, a los que no nos respetan la cultura y las costumbres, y nos quitan la tierra, y nos niegan el derecho de
caminar por ella libremente. Mestizos, campesinos, que hemos venido de las comunidades campesinas y barrios de la costa y la
sierra; de allí de donde nos excluyen, y no nos dan la oportunidad de trabajar.

CUATRO, somos excluidos del proceso de explotación de los recursos naturales. Las empresas madereras, petroleras, mineras,
turísticas y otras, tienen sus centros principales de operaciones en las grandes urbes nacionales y extranjeras; a esta tierra
solamente llegan para aprovecharse los recursos. No dejan beneficio, al contrario deterioran el ambiente: destruyen la tierra,
contaminan el agua y el aire. Tampoco ocupan la mano de obra de esta región; nos desprecian porque creen que somos
totalmente ignorantes. Apenas nos utilizan para los trabajos más pesados, inferiores y mal pagados, sin seguridad social y sin
los beneficios correspondientes de utilidades.

CINCO, somos excluidos de la atención a la salud. Hasta ahora no hay un gran hospital, en esta tierra de donde se extrae el
petróleo, café, madera, aceite, recursos que generan más de la mitad del dinero para el presupuesto general del estado. Apenas
existe un centro-hospital con 25 camas para atender la salud de esta provincia donde vivimos 120 mil personas.

SEIS, somos excluidos de la educación. Somos un pueblo sin escuelas, sin colegios y sin universidades que atiendan a todos los
sectores, reconociendo la diversidad de este pueblo, y respetando las culturas de los indígenas, de los negros y de todos los
mestizos. Las comunidades campesinas, en un alto porcentaje tienen que pagar el sueldo a sus profesores, tiene que construir
sus aulas, y sus hijos no pueden pasa más allá de terminar la escuela primaria. Las pocas escuelas y colegios, trabajan pero
alejados de los avances científicos y tecnológicos.

SIETE, estamos excluidos del mundo moderno. Los medios de comunicación: teléfonos, carreteras son deficientes, desatendidas
y no satisfacen las necesidades de los habitantes de esta región.

OCHO, estamos excluidos de nuestros propios representantes políticos. Ellos se hacen elegir y luego se van a la capital, se
olvidan de la realidad, y desatienden los ofrecimientos de campaña.

Por esto se justifica el GRITO DE LOS EXCLUIDOS, y el pueblo gritará a todo pulmón, porque está excluido del agua potable, de
la energía eléctrica, de la vivienda, de la alimentación, de la recreacción y hasta del descanso.

Este grito, que será Latinoamericano, reconfortará a este pueblo e invitará a seguir luchando para evitar que estos otros 500
años, la vida sea nuevamente llena de esclavos, pobres y explotados.

Nery Valencia

RADIO SUCUMBIOS