El llamado de Evo Morales a los Movimientos Populares
De la resistencia a la apropiación del poder político
Si uno de los grandes desafíos de los movimientos populares es, como dijo Margaret Archer, presidente de la Pontificia Academia de Ciencias Sociales, la de convertirse en “Forma legítima de gobierno,” de acuerdo con el principio de “La democracia participativa que trasmite desde abajo las necesidades de los pobres “, no había nadie más indicado por Evo Morales, líder popular que se convirtió en el presidente de Bolivia, para abordar la cuestión.
Sus propias palabras pusieron fin a al segundo día de la reunión de los movimientos populares ” Tierra, Techo, Trabajo, “, dedicado a la reflexión sobre las causas estructurales de la exclusion: “no hay nada sagrado en el capitalismo “, porque,” en sus manos, todo se convierte en una mercancía, y se compra y se vende la vida misma”. Pero es de la experiencia de la refundación de Bolivia que Morales habló, destacando la necesidad de que los movimientos pasen de la fase de resistencia a la apropiación del poder político, la lucha social para la campaña electoral, en nombre de la democracia representa los intereses de las personas y no el mercado. No es casualidad que el Ministerio de Trabajo ha pasado de las manos de un empresario a las de un trabajador – y que no está dominado por la lógica de la mayoría y la minoría, sino por un proceso de toma de decisiones basado en consentimiento.
La apropiación del poder político que se traduce de inmediato, como demuestra precisamente el caso Bolivia, la renuncia a la guerra y la promoción de una cultura de paz. Este rechazo de cualquier invasión – en la forma de guerra que América Latina conoce tan bien – que ha llevado a la expulsión del embajador de Estados Unidos en Bolivia porquè “donde hay un embajador de Estados Unidos siempre hay un golpe de Estado – broman los latinoamericanos y si Estados Unidos nunca ha sufrido un golpe, solo es que no tiene una embajador de Estados Unidos”. Siempre hay excusas, él Morales señaló, para justificar la intervención militar: Si no es el terrorismo, son los derechos humanos, ola trata de personas o de drogas. El tráfico de drogas es sólo una excusa, el gobierno boliviano ha logrado reducir – sin violencia y conflicto, sólo ofrecer otras opciones en la vida – la zona dedicada al cultivo de coca de 32 mil hectáreas a 23.000.
Después de la re-creación política, económica, hemos comenzando con la nacionalización de los recursos naturales: si con la explotación de hidrocarburos antes quedaba solo $ 300 millones al estado, son ahora más de $ 5 billones, una cifra importante que nos ha permitido erradicar el analfabetismo, luchar contra la temprana salida de la escuela y mejorar los servicios básicos, que, insistió Morales, nunca debe reducirse a un asunto privado. Sin contar el inicio de un proceso que, a partir de la exportación de materias primas sin valor agregado, está promoviendo la primera vez, la industrialización del país, para mover entonces el siguiente paso, el de promover una economía del conocimiento.
Por último, la defensa de la Madre Tierra, la Pacha Mama, el nuestro planeta enfermo del capitalismo: no se puede aceptar, dijo, que la Tierra se reduzca a una simple mercancia de acuerdo con las leyes del mercado. Morales advirtió que: el planeta puede seguir existiendo sin nosotros, pero nosotros no podemos vivir sin la Tierra, nuestra casa, nuestra casa común. De ahí el compromiso del gobierno para un nuevo modelo energético para la promoción familia de agricultores y el aumento en el consumo de productos locales, así como la lucha contra los transgénicos y la especulación financiera con los alimentos.
octubre 29th, 2014