Este domingo 21 de abril de 2013 a eso de las 4 de la tarde, fue asesinado de 8 disparos el campesino Alfonzo Bonilla de 45 años de edad y padre de 5 hijos.  Mientras se encontraba en su casa de habitación, sentado en una silla comiendo, luego de llegar de trabajar su parcela de tierra, llegaron alrededor de 6 individuos fuertemente armados quienes sin mediar palabras comenzaron a disparar ráfagas de tirros contra la humanidad de Bonilla destruyéndole en su totalidad el rostro.

Alfonzo Bonilla era secretario de la regional de la Asociación Nacional de Campesinos Hondureños (ANACH), además de presidente de otra empresa campesina de la zona.  Su hija, candidata a alcaldesa por el municipio de Santa Rosa Aguan, manifestó que su papá estaba siendo constantemente amenazado por miembros de una cooperativa que hay en la zona con quienes mantenían un conflicto por la tenencia de la tierra.

Según testigos, los hechores aprovecharon que los dos hijos mayores de Bonilla salieron de la casa para asesinarlo frente a los hijos menores de edad y su esposa, no sin antes amenazar con armas de grueso calibre a toda la familia que se encontraba en el momento del crimen.

Al lugar se hicieron presentes las autoridades policiales correspondientes, sin embargo la familia de Alfonzo expresó que estos hechos quedan siempre en la impunidad, pues no se investigan y tampoco se castiga a los responsables de estos crimines, que casi a diario ocurren en la zona del Aguan.

El movimiento campesino Hondureño articulado en La Vía Campesina Honduras, lamenta y repudia que se sigan dando este tipo de hechos violentos en contra de la vida de valiosos compatriotas que luchan día a día por la tierra.  A la vez condena la negligencia de las autoridades del Instituto Nacional Agrario (INA), que han sido incapaces de dar respuestas concretas al campesinado hondureño respecto a la legalización y titulación de las tierras en conflicto.

Hacemos un llamado urgente a los organismos defensores de los Derechos Humanos nacionales e internacionales a que se hagan presentes en la zona del Aguan, así como también a las autoridades correspondiente a que investiguen todos estos crímenes contra campesinos y campesinas que se están dando sobre todo en la zona del Bajo Aguan, una región que permanece militarizada sin ningún resultado positivo para la población, pues los crímenes continúan dándose.

PORQUE LA TIERRA NOS PERTENECE, LUCHAREMOS HASTA EL FINAL

SANGRE DE MARTIRES, SEMILLA DE LIBERTAD