Colombia : Declaración de las Organizaciones y los Pueblos Indígenas
Cabildo Menor Indígena Escobar Arriba, Sucre
10 al 13 de febrero de 2013
Nosotros los Pueblos y Organizaciones Indígenas reunidos en el Cabildo Menor Indígena de Escobar Arriba, territorio Zenú (Sucre), en la Cumbre Ideológica de los Pueblos Indígenas; nos hemos encontrado como hermanos y hermanas guiados por nuestros espíritus, antepasados y sabedores, para pactar en esta gran minga de pensamiento, criterios colectivos que unen nuestra voz y sentir.
Asumimos que nuestras Leyes de Origen y Derecho Mayor son y han sido desde el inicio de los tiempos la guía de nuestros caminos y garantía de nuestra pervivencia; mandatos ancestrales que nos hacen un llamado a la unidad, caminar la palabra, tejer a 102 manos, seguir luchando, seguir resistiendo. Son estos principios fundamentales y visiones eternas, las que nos invitan a la renovación de nuestro movimiento, hablando a una sola voz, hermanándonos como pueblos originarios conscientes que solo la unidad nos permitirá enfrentar la grave afectación de nuestros derechos individuales y colectivos.
Hoy, a los múltiples factores de vulneración que profundizan el riesgo de extinguirnos física y culturalmente, se suman el desconocimiento de acuerdos suscritos por el gobierno como medidas afirmativas que pretenden subsanar la persecución, exclusión y discriminación histórica de las cuales hemos sido víctimas y la velada campaña de desprestigio encabezada por medios de comunicación masivos de gran poder en el país, con las cuales se pretenden desdibujar nuestros derechos humanos y fundamentales y se propicia todo un escenario de estigmatización.
La Cumbre Ideológica de los Pueblos indígenas de Colombia, ha resultado una minga de diversidad de pensamientos sobre la unidad y el diseño de una agenda propia para los tiempos venideros, en la cual hemos decidido suscribir un Pacto de unidad política el cual no es más que la reafirmación y renovación de los principios que han fortalecido al movimiento indígena. La UNIDAD en la diversidad será nuestra fuerza; ratificación del equilibrio y armonía entre pueblos y organizaciones indígenas, fundamento de la resistencia colectiva por los duros desafíos que se nos presentan en estos nuevos tiempos, por la vulneración masiva y sistemática contra nuestras vidas, territorios, historia y autonomía.
Manifestamos que nuestro relacionamiento con la comunidad internacional, la cooperación y frente al Gobierno de Colombia, se dará teniendo presente los principios fundantes de nuestras organizaciones. Con base en esto, exigimos el respeto a nuestras Leyes de Origen, el Derecho Mayor, los mandatos de nuestros congresos y asambleas comunitarias, el pleno cumplimiento de la constitución política del 91, la aplicación de las leyes, providencias de las Cortes Nacionales e Internacionales y los mandatos de la comunidad internacional.
Por tal motivo, los Pueblos y Organizaciones Indígenas aquí reunidos,
DECLARAMOS:
PRIMERO: Reorientamos nuestro trabajo de acuerdo a una agenda propia y colectiva, que acoge nuestras prioridades y las difíciles situaciones que afrontamos en los territorios indígenas a lo largo y ancho del país.
SEGUNDO: Nuestra plataforma de trabajo se fundamenta en la lucha permanente por la unidad, la defensa del territorio, la preservación de la identidad cultural y el ejercicio pleno de la autonomía, autodeterminación y el autogobierno.
TERCERO: Es necesario avanzar en la implementación del derecho al consentimiento previo libre e informado, incluyendo el derecho a la objeción cultural y espiritual de los pueblos indígenas, en los términos establecidos por la Declaración de Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos indígenas. Decidimos no renunciar a este derecho y destacamos la importancia de la participación efectiva de las organizaciones indígenas en las cuales nos articulamos.
CUARTO: Ratificamos el Buen Vivir como alternativa al modelo actual de desarrollo extractivista y de saqueo de nuestros recursos, porque nuestra propuesta propende por la armonía con la naturaleza, el respeto a la vida en su integridad. Reafirmamos los planes de vida de los diferentes pueblos y regiones y exigimos su implementación en nuestros territorios.
QUINTO: Requerimos que la negociación en el marco del proceso de paz contemple en el escenario de diálogo a los Pueblos Indígenas y se propenda por la Justicia Social fundamentada en el reconocimiento pleno de nuestras autoridades tradicionales, el derecho fundamental al auto gobierno y a la autodeterminación.
SEXTO: Decidimos NO PROTOCOLIZAR la Consulta Previa del Proyecto de Ley de Tierras y Desarrollo Rural, hasta conocer los acuerdos que sobre la materia se suscriban en el marco de los diálogos de paz que se desarrollan entre del gobierno y las FARC.
SEPTIMO: En materia de concertación y diálogo con el Estado, las prioridades de los pueblos y organizaciones indígenas se concentrarán en los siguientes temas:
- Reconocimiento de la Autoridad ambiental Indígena;
- Sistema de Educación Indígena Propia (SEIP);
- Sistema Integral de Salud de los Pueblos Indígenas (SISPI);
- Consolidación de los Resguardos Indígenas, ETIS y territorios indígenas Ancestrales.
- Ampliación, reafirmación, constitución y saneamiento de nuestros territorios;
- Adopción de manera concertada de una política pública integral de Estado para los Pueblos Indígenas, que se debe materializar en un documento CONPES;
- Implementación del programa de garantías, los planes de salvaguardas y el Decreto 4633 de 2011;
- Cumplimiento del Plan Nacional de Desarrollo en su capítulo concertado con los pueblos indígenas entre otros aspectos.
En este sentido exigimos al gobierno nacional replantear las prioridades que se han establecido en la agenda. Así mismo exigimos que los procesos de consultas que se adelanten cuenten con garantías políticas, jurídicas, de protección territorial, materiales, económicas y técnicas para el desarrollo de estos procesos en nuestros territorios. Estos procesos de Consulta se deben llevar a cabo de manera gradual, respetando los tiempos, el idioma y las cosmovisiones indígenas.
OCTAVO: fortalecer la capacidad de participación real y efectiva para la incidencia y la toma de decisiones de las Mujeres Indígenas, como un requisito indispensable para las garantías plenas de de sus derechos y de los pueblos indígenas. Exigimos la protección.
NOVENO: Decidimos respaldar los procesos de movilización en defensa de los derechos impulsados por otros sectores sociales en defensa de la vida y la dignidad.
DÉCIMO: Decidimos participar en la V Cumbre Continental que reunirá a todos los Pueblos Indígena del continente, como escenario preparatorio a la Primera Conferencia Mundial de las Naciones Unidas a realizarse en el año 2014.
DECIMO PRIMERO: Decidimos acordar un pacto de unidad política y organizativa en temas estructurales para los Pueblos Indígenas. Esta instancia nacional de coordinación entre las distintas organizaciones se reunirá periódicamente y de manera autónoma para definir acciones de articulación y oficializamos el espacio de la Cumbre como un escenario de articulación periódico de las organizaciones.
Los Pueblos Indígenas tenemos una historia común, identidades diversas, un proceso de lucha como herencia de nuestros mayores y un planteamiento ideológico que consolida el contenido de nuestras causas; somos herederos de nuestros ancestros, estamos marcados por la sangre de nuestros héroes y no seremos inferiores a este reto. Seguiremos luchando por la defensa de nuestros derechos, sueños y metas, en un solo tejido cósmico que se ha fortalecido con la unidad y la movilización. Estas son nuestras palabras que buscan la garantía de la pervivencia física de nuestros Pueblos Indígenas y su permanencia en la historia.
SOMOS PUEBLOS DE LA MADRE TIERRA, SOMOS PUEBLOS DE LA VIDA, SOMOS PUEBLOS EN RESISTENCIA MILENARIA