Las organizaciones campesinas que formamos la Red Agraria Nacional: Coordinadora Nacional Campesina Eloy Alfaro, CNC_EA; Federación Nacional de Trabajadores Agroindustriales y Campesinos Libres del Ecuador, FENACLE; Corporación Regional de Montubios del Litoral, CORMONLIT; junto a la Federación de Organizaciones Campesinas del Litoral, FOCAL; la Federación Regional Tierra y Vida de la provincia de El Oro, Federación de comunas, Juventud Comunista Ecuatoriana, al igual que las organizaciones que forman el Consejo Campesino Consultivo Sectorial del MAGAP, juntos en un  espacio de articulación indígena, campesina y montubia, del Ecuador” presentaron ayer 18 de octubre, en el Ágora de la Casa de la Cultura Ecuatoriana de Quito, el MANDATO CAMPESINO a diferentes instancias del Ejecutivo y de la Asamblea Nacional.
 
Este es un primer paso de nuestro accionar conjunto, llegando a configurar el “mandato de las organizaciones del campo”, que es el resultado de los distintos talleres regionales que hemos llevado a cabo con hombres y mujeres representantes de las organizaciones de base, en especial en los eventos de Riobamba (sierra centro del país), Guayaquil (puerto principal) y Cuenca (sierra sur del país), indicó Romelio Gualán. Agradeció la presencia de autoridades como Rosa Mireya Cárdenas Ministra de la Secretaria de Pueblos; Irina Cabezas, María Agusta Calle, Pedro De la Cruz y Virgilio Hernández, asambleístas y a María de Lourdes Urbaneja, embajadora de Venezuela,  que acudieron al  magno evento.
 
Como una contribución para profundizar la revolución agraria en el país la articulación indígena, campesina y montubia, del Ecuador” presento propuestas que buscan solucionar:
 
·         Los bajos niveles de ingreso de las economías familiares campesinas,
 
·         La baja productividad de la mano de obra rural,
 
·         La desocupación especialmente de la juventud,
 
·         El  avance de  los procesos de reconcentración de la tierra destinada a cultivos
 
·         La concentración del agua para riego,
 
·         La vulnerabilidad de numerosas comunidades frente a los cambios extremos en la naturaleza,
 
·         El creciente control de pocas empresas sobre la producción y comercio de productos agrícolas,
 
·         La desigualdad en los mecanismos de comercialización.
 
·         Los intensos procesos de deforestación, erosión y pérdida de la fertilidad del suelo,
 
·         La escasez y contaminación del agua,
 
·         La desertificación y pérdida de diversidad biológica (agro-biodiversidad) por la destrucción de los ecosistemas.
 
 
 
REDACCION CNC-ELOY ALFARO