La CONAIE, frente a la realización del 42. Periodo Ordinario de Sesiones Asamblea Ordinaria de la OEA, que se realiza del 2 al 5 de junio, en Cochabamba-Bolivia, donde se tratara como tema central la “Seguridad Alimentaria con Soberanía en las Américas”; pero, también se debatirá la salida de Bolivia al Mar y el conflicto por las islas Malvinas, y las reformas de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos -CIDH-, expresa lo siguiente:
 
1.      El sistema jurídico político internacional surgido después de la segunda guerra mundial y construido al calor de la llamada guerra fría, fue gravemente afectada por la hegemonía unilateral del Estado imperialista estadounidense, y que actualmente está siendo rebasada por la crisis económica mundial, que entre otras cosas, desarticula el viejo esquema internacional y las vuelve ineficiente y anacrónico con las nuevas necesidades de los pueblos y la realidad que vive América. Por lo que se hace necesario una urgente transformación de las instituciones que sostienen el sistema internacional. La OEA deber levantarse sobre la base de la existencia de los nuevos Estados existentes: Plurinacionales, interculturales y comunitarios, por lo que, si bien los Estados deben participar, este organismo multilateral debe permitir también la participación directa de los pueblos en general y de los pueblos indígenas en concreto.
 
La CIDH jamás se ha pronunciado frente a la sistemática violación de los derechos humanos. Especialmente las de los pueblos Indígenas de nuestra América que ahora son, perseguidos, enjuiciados y acusados de terroristas por los Estados y empresas transnacionales.
 
2.      La soberanía alimentaria, como parte de un nuevo modelo alternativo, es la propuesta en respuesta a la crisis económica mundial al capitalismo, que estamos atravesando y que ha evidenciado sus profundas contradicciones y límites, así como su incapacidad para resolver la situación de los pueblos oprimidos y explotados. Para que la soberanía alimentaria sea viable es necesario y urgente: una revolución agraria regional para la democratización de las propiedades, democratización de los mercados y la Democratización de la Economía. En América Latina se presentan los índices de mayor concentración de tierras, agua y mercado de alimentos; mientras a millones de pobres que estamos viviendo en extrema pobreza nos imponen solo bonos, Nuestra América tiene que dejar de ser continente de bonos. Si queremos salir de la crisis con un marco de democracia y equidad, una redistribución de estos recursos es una necesidad y un derecho. La OEA, si en realidad quiere resolver los problemas de la región, debería definir a la soberanía alimentaria como un derecho humano y una condición de la soberanía de los Estados.
 
3.      Finalmente. La salida de Bolivia al Mar es un derecho histórico y de reparación, como CONAIE apoyamos a esta lucha histórica de los pueblos de Bolivia.
 
Quito, 4 de junio, del 2012
 
Por el Consejo de Gobierno
 
HUMBETO CHOLANGO
Presidente de la CONAIE